30 Days of Smut Challenge ➸ YoonMin [윤민]

E I G H T E E N

Jimin caminaba por una calle solitaria, el cielo nocturno se oscurecía cada vez más y su visión se basaba únicamente en las farolas que se encendían cada pocos metros. Amaba la noche, el cielo nocturno y lo inquietantemente tranquilo que era. Le encantaba el elemento de peligro. Los sitios de construcción sin terminar y abandonados que eran una mina de oro para aventureros y vagabundos sin sentido. Un hombre ocasional y espeluznante que bajaba la ventanilla de su auto y le ofrecía una mano de ayuda poco sincera. Toda la situación era apresurada. Le dio a Jimin el tiempo y el espacio para ser alguien que no era. Para ser alguien que no tenía que ser. Que sus padres no lo obligaron a ser.

No fue una de las decisiones más inteligentes, estar vagando por el centro en medio de la noche completamente solo. Pero era agotador ser inteligente todo el tiempo. Era cansado ser el buen chico con las buenas notas. A veces se necesita una salida, y el centro era de Jimin. Nunca hizo nada estúpido. Siempre se aseguró de tener suficiente tiempo para regresar al último autobús a su vecindario. Él siempre se aseguró de estar en casa antes de que su padre tocara el toque de queda que le habían impuesto sus padres. No, por supuesto que no sabían a dónde iba, pero mientras él regresara a salvo y dentro del marco de tiempo, estaba bien. Sus padres fueron ajenos a este tiempo de su pase. Eran lo suficientemente ingenuos como para creer que Jimin estaba estudiando en la casa de Taehyung. Una mentira fácil de seguir adelante con su reputación en casa.

Pero había algo diferente en esta noche. Jimin no estaba completamente seguro de qué era exactamente, pero algo en el aire y en sus pensamientos era diferente de lo habitual. Hizo clic en su teléfono para verificar la hora, eran solo las 10 p.m. La noche aún era muy joven, pero el toque de queda se acercaba cada vez más. Tenía que estar en casa a las 11:30 PM. Qué aburrido. Todo lo mejor sucedía a medianoche, pero Jimin siempre estaba demasiado asustado para quedarse aquí más tarde de lo que le permitían. Lo que era realmente tonto. Tenía más miedo de no llegar a casa, en lugar de tener miedo de lo que esta área tenía para ofrecer, temprano en la mañana.

Jimin siguió repitiendo la conversación que había tenido con su madre esa mañana. Ella lo obligó a tomar una clase AP* adicional porque tenía el cerebro y estaría 'perdiendo una oportunidad' de lo contrario. Más como perder un tiempo valioso para respirar y sobrevivir al infierno que era el último año. Jimin no podía esperar para graduarse, mudarse y estudiar algo que realmente amaba. Sí, tenía un cerebro y sí podía usarlo, pero no le apasionaba nada académico, nunca lo había sido. Era bailarín y ahí radica su pasión. No con el cálculo y la física, sino con el ritmo de una canción y el flujo de sus extremidades. Transmitir una historia con nada más que sus propios movimientos físicos y expresiones faciales. Eso era lo que quería hacer con su vida, y solo eso. ¿Por qué nadie podía entender eso?

La conversación había estado devorando a Jimin toda la noche y lo llevó al borde de este desierto abandonado. A una zona del centro dónde nunca había estado antes. ¿Y fue algo hermoso? La tranquilidad de la nada, el silencio espeluznante y la oscuridad implacable. Era todo lo contrario de la personalidad y la vida cotidiana de Jimin, pero eso es lo que le gustaba tanto. Espera siempre lo inesperado. Jimin tenía muchos trucos bajo la manga después de todo. Nunca fue predecible, no con personas que lo conocían genuinamente por lo que era.

Giró a la izquierda, a la derecha, a la izquierda y siguió recto. Se encontró a lo largo de una línea de costa, una playa de piedras con un mar azul oscuro. Dios, era una vista. Jimin respiró hondo antes de saltar por encima de la barrera y correr hacia la línea de la costa. El viento estaba callado y las olas se movían lentamente, casi como en cámara lenta, y era hermoso. Jimin se quitó la ropa y corrió hacia el agua sin preocuparse por nada del mundo, dejando su teléfono en la pila y dejando que su mente corriera libre.