Está prohíbido renunciar

Primera tormenta juntos

Así comenzó todo,con una tormenta....

En el cielo se ven los relampagos,tan hermosos pero al mismo tiempo aterradores, es increible como consiguen implantar miedo y asimismo causar admiración .

Pero en el caso de la pequeña Layra, solo le causa terror.

Acurrucada la pobre niña de 6 años bajo el cobijo de un árbol no sabe que hacer, vestida solo con un vestido delgado, tiene tanto frio que tiembla; no tiene a donde ir, mentalmente se dice a si misma: "piensa, piensa.. alguna tía o familia."

Pero no, toda su familia se encontraba en el extranjero, al igual que sus padres deberian estar despues de haberla abandonado para cruzar la frontera con Canada.... Aun recuerda toda la conversación de sus padres....

Flash back

-Hay que dejarla.- dijo su padre.

Inmediatamente su madre dejó de barrer

-¡Pero es nuestra hija, no podemos avandonarla! - dice la madre de Layra

Su esposo la mira fulminante, se para de la silla y poniendose frente a su mujer le dice:

-No tenemos suficiente para pasar los tres la frontera, y prefiero salvar mi pellejo que el de esa escuincla,ademas, si tuvieramos suficiente dinero,¿Qué futuro le podriamos ofrecer? Te recuerdo que la policia nos persigue.Lo mejor es dejarla,será facil,solo tenemos que llevarla a un parque y listo de ahí que ella se las apañe.

Layra al escuchar lo que planeaban sus padres lloró hasta caer dormida.

Fin flash back

Y de ahí el porqué de que esté debajo de un árbol.

Layra empieza a estornudar, sabe que si sigue debajo de ese árbol se va a resfriar,así que corre y a unos metros ve una banca, se asoma debajo y ve a un niño de aproximadamente su edad, blanco como la nieve, con un cabello negro que contrasta perfectamente con su piel, pero lo que más llama la atención son sus ojos..... violetas. Un hermoso violeta.....

Carraspea y le pregunta:

-¿Puedo entrar?

El niño sorprendido de que esa niña de cabello como el oro y ojos grises como de tormenta no se hubiera asustado al ver el color de sus ojos, asiente.
Layra agradecida entra y se acurruca en una esquina, quedando frente al niño de ojos violetas.

El niño sumido en sus pensamientos y sorprendido porque la niña no se haya asustado al ver su tono de ojos, queda confundido,no sabiendo que pensar solo se le viene una cosa a la cabeza: "Al parcer hay gente que mira a los monstruos diferentes "

Layra para interrumpir el incomodo silencio trata de hacer conversación con el niño:

-¿Cómo te llamas?

El niño incredulo porque la niña quiera hablarle,se queda bloqueado, sin saber que hacer. Layra ve su cara y sonríe de forma comprensiva,le repite la pregunta con una sonrisa en la cara y esta vez el niño sí contesta.

-Daniel... me llamo Daniel.

-Yo Layra, encantada.

"Layra ...-piensa Daniel-...un lindo nombre que acompaña a una linda niña de ojos tormentosos"

Por otro lado,Layra pensaba "Daniel, el niño de los hermosos ojos violeta ".

-Pero..... perdón que pregunte esto es solo que.... ¿No te doy miedo?-dijo Daniel

Layra parpadeo un par de veces y fruncio el ceño.

-¿Porqué deberias?

Daniel no podia crer que o esa niña era muy despistada, o no era como los demas.

-Bueno porque.... ¿Acaso ya viste mis ojos?

-Si,son de un hermoso violeta,mi color preferido. -dice sonriendo Layra.

"Vale, Layra no es una despistada despues de todo" piensa Daniel.

-....Pero,¿Qué tiene eso que ver con que deberias darme miedo?- pregunta Layra.

Daniel suspira y se da cuenta de que llegó a la parte a la que no quería llegar....la parte en la que le cuenta a alguien la verdad sobre el... y lo peor, le contará a la primera persona que no lo ha tratado de monstruo....

-La gente piensa que soy un monstruo, mis padres..... ellos.... -traga saliva, incapaz de decirle a esa niña todas las atrocidades que ha vivido a causa de sus padres -...no me querian -dice en cambio -....me han abandonado porque pensaban que era un monstruo.... por eso me sorprende que tú no pienses lo mismo.

Layra sonríe compasiva, no es la unica niña a la que no quieren sus padres.... eso la hace querer abrirse con Daniel, así que incapaz de no compartir con Daniel su sufrimiento, le cuenta todo lo que le pasó y que tambien la han abandonado.

Daniel escucha atento y la entiende, de ahí porqué salen de su boca las siguientes palabras:

-No tengo mucho que ofrecerte puesto que soy un niño y estamos en las mismas, Pero si te puedo dar mi apoyo y amidad incondicional.

Layra sonríe feliz, un mejor amigo, eso necesitaba.

-Mejores amigos entonces.-dice Layra tendiendole el meñique y mirandolo fijamente

Daniel le devuelve la mirada y extendiendo su meñique, aptrieta el de Layra y así juran ser mejores amigos para siempre.

-Mejores amigos. -repite Daniel.

"La niña de ojos tormentosos y el niño de ojos violetas...-piensa Daniel -....mejores amigos para siempre "

La tormenta desaparece tan rapido como apareció, brindandole a los niños una promesa silenciosa de que despues de la lluvia aparece siempre un arcoiris ...