T/N
La puerta estaba medio escondida detrás de una cesta de la lavandería del hotel llena de toallas sucias. No tenía nada de particular, pero Rachel señaló dónde debía mirar y distinguí el símbolo azul, apenas visible en la superficie de metal.
"Lleva mucho tiempo en desuso." observó Annabeth.
"Traté de abrirla una vez." dijo Rachel "Por simple curiosidad. Está trancada por el óxido."
"No." me adelanté "Sólo le hace falta el toque de un mestizo."
En cuanto puse la mano encima, la marca adquirió un fulgor azul y la puerta metálica se abrió con un chirrido a una oscura escalera que descendía hacia las profundidades.
"¡Uau!" Rachel parecía tranquila, aunque yo no sabía si fingía. Se había puesto una raída camiseta del Museo de Arte Moderno y unos vaqueros decorados con marcador, los mismos que tenía la primera vez que la ví. Del bolsillo le sobresalía un cepillo de plástico azul. Llevaba el pelo rojo recogido en la nuca, todavía con algunas motas doradas. En la cara también le brillaban algunos restos de pintura "Bueno... ¿pasan ustedes primero?"
"Tú eres la guía." repliqué "Adelante."
Las escaleras descendían a un gran túnel de ladrillo. Estaba tan oscuro que no se veía nada a medio metro, pero Percy, Annabeth y yo nos habíamos aprovisionado con varias linternas y, en cuanto las encendimos, Rachel soltó un aullido.
Un esqueleto nos dedicaba una gran sonrisa. No era humano. Tenía una estatura descomunal, de al menos tres metros. Lo habían sujetado con cadenas por las muñecas y los tobillos de manera que trazaba una «X» gigantesca sobre el túnel. Pero lo que me provocó un escalofrío fue el oscuro agujero que se abría en el centro de la calavera: la cuenca de un solo ojo.
"Un cíclope." señaló Annabeth "Es muy antiguo. Nadie... que conozcamos."
«No es Tyson», quería decir, aunque eso no me tranquilizó. Tenía la impresión de que lo habían puesto allí en señal de advertencia. No me apetecía tropezarme con lo que fuera capaz de matar a un cíclope adulto.
Rachel tragó saliva.
"¿Tienen un amigo cíclope?"
"Tyson." contestó Percy "Mi hermanastro."
"¿Cómo?"
"Espero que nos lo encontremos por aquí abajo." comentó mi amigo "Y también a Grover. Un sátiro."
"Ah." dijo Rachel con una vocecita intimidada "Bueno, entonces será mejor que avancemos."
Pasó por debajo del brazo izquierdo del esqueleto y continuó caminando. Annabeth y yo nos miramos un momento; ella se encogió de hombros y luego seguimos a Rachel rumbo a las profundidades del laberinto.
Después de recorrer unos ciento cincuenta metros llegamos a una encrucijada. El túnel de ladrillo seguía recto. Hacia la derecha, se abría un pasadizo con paredes de mármol antiguo; hacia la izquierda, un túnel de tierra cuajada de raíces.
Percy señaló a la izquierda.
"Se parece al camino que tomaron Tyson y Grover."
Annabeth frunció el ceño.
"Si, pero a juzgar por la arquitectura de esas viejas losas de la derecha, es probable que por ahí se llegue a una parte más antigua del laberinto. Tal vez al taller de Dédalo."
"Debemos seguir recto." decidió Rachel.
Los tres la miramos.
"Es la opción menos probable." objetó Annabeth.
ESTÁS LEYENDO
ᴘᴇʀᴄʏ ᴊᴀᴄᴋsᴏɴ: ʟᴀʙᴇʀɪɴᴛᴏ
Fanfictionᴘᴇʀᴄʏ ᴊᴀᴄᴋsᴏɴ x ʟᴇᴄᴛᴏʀᴀ Todo los personajes pertenecen a la saga Percy Jackson y los Dioses del Olimpo escrita por Rick Riordan, excepto por T/n Libros en esta saga: Percy Jackson: Ladrón Percy Jackson: Monstruos Percy Jackson: Maldición Percy Jacks...