💣No soy solo un asesino más 💣

Empieza Lo Bueno

Pasaron días después de que me fui de mi casa y esta vez me dedicaba al 100% de mi tiempo a mi entrenamiento. Cosa que mi tío agradecía.

Pero a la vez que iba avanzando en mi entrenamiento lo veía cada vez menos.

Salía a hacer tratos o asesinar como es de costumbre en el, no me molesta es solo que quisiera que el estuviera un poco más atento a lo que yo hago.

Una noche en la cena el quizo hablar un poco más conmigo de lo normal que me dice de las cosas que hace.

-¿sabes a donde fui hoy?

-No tengo ni idea pero, cuéntame.

Ya le hablaba sin interés debido a que todos los días eran iguales. Parecía que ya me conocía la rutina de memoria.

El sale a algún lugar y vuelve aveces cansado y no tenemos tiempo de hablar o que me enseñe alguna técnica nueva o que al menos me mire en algún entrenamiento.

-pues fui al anillo de la gula para un encargo muy importante.

-No me digas.

-si y fue algo muy emocionante.

-si si si, tío ¿Te puedo preguntar algo?

-mmm, depende de que sea.

-pues voy muy avanzado en mi entrenamiento según tu empleado y pues..... ¿Cuando haré alguna misión o lo que sea? Ya estoy algo arto de lo mismo, ya quiero algo más.... Estimulante.

-oh claro......... Lo pensaré.

¿¡Pensarlo!? Ok esa es una posible buena noticia que sinceramente no esperaba.

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Era de madrugada cuando alguien vino a despertarme con mucha brusquedad.

Era mi entrenador quien me estaba despertando.

-despierta dormilón.

-eh, ¿qué quiere? Es muy temprano para estar molestando, no mame.

-ah, okey supongo que buscaré otra persona que sea mi compañero en la misión de hoy.

-¡estoy despierto!

-bien, baja a la bodega hay están las cosas que utilizarás.

Emocionado baje a toda velocidad a la bodega y hay estaba un montón de casilleros donde uno tenía mi nombre.

Tenía la llave colgada del serojo del casillero haci qué no había problema.

Cuando lo abrí vi una camisa blanca, una corbata negra y un pantalón negro con tirantes, zapatos negros y una máscara.

Me puse todo lo que había en el casillero y resulta que todo era de mi talla. Cuando vi más en el fondo del casillero pude ver un revolver.

Lo tome y me lo guarde en la funda del pantalón donde cabía perfectamente.

Cuando me voltee vi como mi tío me miraba y sonreía con un gran orgullo, haci qué me aserqué a él.

-esa qué tienes hay fue mi primera pistola y pensé que tu la nesecitarias.

-si señor.

-y recuerda que si te mueres yo te mataré después.

-si señor.

Al despedirme me dio un abrazo y un broche con el signo del clan o organización.

En la salida había una camioneta esperándonos con 3 imp's más adentro de ella.