Ahí estába ella mirandome con ojos expectantes a unos cuantos metros de mi posando en la alfombra, seguramente pensaba lo mismo que yo.
Seguramente deseaba correr a abrazarme y besarme tanto como yo lo deseaba, probablemente también hacia su mejor esfuerzo por contener una sonrisa y sus manos temblaban tanto como las mías con el deseo de poder tocarse.
Toda esta gente estaba a mi alrededor pero yo solo la miraba a ella, cientos de personas y yo solo pensaba en ella, pensaba ¿Será obvio para todos ellos lo mucho que quiero ir hacia ella? ¿Seré buena disimulando? ¿Debería mandar todo a la mierda y simplemente hacerlo?
Había olvidado que el mundo se puede detener si está cerca mío, solo existimos ella y yo y el tiempo pasa lento.
Paso lentamente el tiempo mientras ella se acercaba a mi, parecían pasar años hasta que por fin estuvo cerca mío.
-Hola- sonrio amablemente hacia mi y Joe mientras yo salía de mi burbuja.
-Hola- dije gritando debido al ruido del lugar con la sonrisa más tonta que pudiese existir
La abrace, pero fue un abrazo corto.
La abrace como habría abrazado a una amiga a la cual saludas casualmente, no como habría abrazado a la chica que amo y he extrañado estos meses de distancia, no la abrace como si no quisiera dejarla ir, por qué no quiero.
Solo la toque dos segundos y palmee su hombro, pero fue suficiente para sentir que mi guardia bajaba y por fin estaba en paz.
-¿Cómo estás?- dijo en español ignorando a joe sabiendo que no hablaba tal idioma.
-mejor ahora que te veo- dije sabiendo que Joe no entendía nada y si alguien más escuchaba lo podía tomar como una conversación cualquiera entre amigas.
-estas preciosa- dijo sabiendo que las amigas se pueden dar halagos
-gracias tú lo estás mucho más- dije de forma sincera.
-debo irme nos vemos más tarde- dijo para después acercarse a mi oído con el pretexto de no poder hablar bajo todo el bullicio.
-te veo en el hotel más tarde, me vuelves loca con lo hermosa que estas- dijo para después despedirse de Joe con un apretón de manos e irse dejándome ahí con las piernas temblorosas de la emoción.
Seguro Joe noto la tensión y tal vez escuchó lo que Vicky dijo pero el no sabía español así que me sentía confiada de que no sospecharía.
No era que me preocupara que se molestará, me preocupaba que intentará arruinarlo... no podía permitirlo.
Miko vía ig:
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