Luego de una eterna —¿Fue eterna?— firma de papeles y charlas incómodas, mi cuerpo fue depositado cuidadosamente en una urna, y aunque no podía observar nada a mi al rededor, una voz infantil, me decía que mis almohadillas eran pálidas y sin vida, y la urna tenía matices similares al tronco de un árbol.
El contacto de mi piel con la lana del traje negro, me causaba un picor horrible, aunque nunca fuí alérgico a la lana, asumo que es el estrés que se acumulaba en mi cuerpo como nubes negras en un cielo a punto de una tormenta , pero no estaba dispuesto a aceptar que yo me estaba causando esta desagradable sensación—mis monstruos me lo decían, el niño me lo decía, hasta yo mismo, lo sospechaba— pero, era mejor culpar a los objetos inanimados, de mis más mínimas desgracias.
El incesante llanto del niño, lo ahogaba a ratos, estaba de costado viendo las paredes— de vez en cuando me dirigía la palabra— el también vestía un traje del mismo color que el mío, y hasta me contó que le quedaba un poco grande, yo no le podía contestar y a él no le apetecía escuchar mi voz.
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Arrepentimiento
ContoEl arrepentimiento es esa tristeza profunda que surge de un hecho pasado, que resultó ser incorrecta o inapropiada ¿Has sentido eso? A veces hay acciones de las que no podemos dar marcha atrás y experimentamos las oleadas del arrepentimiento.
