Más que mil estrellas

CAPÍTULO 4: ¡Al agua patos!

Ambos nos paramos en seco y nos miramos.

—¿Estás escuchando lo mismo que yo cierto?

—¿Esa es la voz de Camila?— pregunté tratando de ver algo entre las ramas.

¿Qué hacía ella aquí? No se supone que no quería venir.

—Son las voces de todas, Cris, Vanessa....

Las que me faltaba, no podía disimular mi descontento, últimamente no sabía cómo sentirme respecto a ellas, algo que Caleb noto al instante e intentó decir algo antes de que Shawn apareciese entre las ramas en frente nuestra sujetando la rama de un árbol.

—¡¿Quién anda ahí?! ¡Ah si son Tessa y Caleb!—exclamó apartándose para que todos pudieran vernos—. Pensamos que erais secuestradores.

—Uh pero, ¿Qué os ha pasado?— pregunto Vanessa mirándonos con mala cara

Caleb y yo nos miramos de arriba a abajo. Era cierto, teníamos unas pintas lamentables.

Había tierra en nuestra ropa y nuestro pelo alborotado y sucio de césped.

Supongo que no fue muy buena idea rodar por la colina después de todo.

—¡Pero si parece que os habéis estado liando detrás de unos arbustos!— Exclamó Lily riendo a carcajadas.

Le eche una mirada furibunda para ver que se echaba a reír aún más. Algún día la acabaré matando. Traicionera.

Todos contuvieron la risa, o bueno, lo intentaron pues no eran muy buenos.

—Oye oye, aunque sé que soy irresistible, Tessa se ha portado bien y ha aguantado exitosamente la tentación.— dijo el muy imbécil con una sonrisa de oreja a oreja. — Aunque no se como.

Le eche a él otra mirada furibunda para luego añadir con una sonrisa.

—Tranquilo tampoco me ha costado mucho esfuerzo, resulta que no eres mi tipo.

—Seguro que no— me dijo dirigiéndose a uno de los troncos para sentarse alrededor de la hoguera.

—Pues no— lo seguí hacia el tronco.

La fogata proporcionaba una ligera calidez reconfortante, ya que aunque no fuera invierno aun, durante la noche bajaban las temperaturas.

—Vale pero alguien nos va a explicar cómo es que habéis acabado así

—Creo que prefieres no saberlo Vanessa— le contestó Lily echándose a reír de nuevo.

—Bueno a mi me gustaría saber como habéis llegado Camila, Vanessa y Cris aquí— dije con la intención de desviar el tema.

—Las cosas una a una, primero contadnos porque parecéis dos supervivientes—. Cris nos miró con la mirada de nuevo.

—Bueno pues os lo explico yo. A vuestra querida genio Tessa se le ocurrió que la mejor manera de bajar una colina era haciendo la croqueta, pues ella salió corriendo y rodó colina abajo. Yo como buena persona normal que soy no tenía idea de que se le pasaría aquella descabellada idea por la cabeza y pensé que se había caído. Así que para llegar a ella más rápido baje roda-

—¡Qué mentiroso eres! Venga, ¿Cuándo piensas contar que todo esto comenzó cuando tu decidiste convertir la llegada al lago en una competición? O que cuando yo baje rodando puede que en un principio creyeras que me había caído pero cuando aún te habías dado cuenta de que no, tu bajaste de la misma forma solo para alcanzarme.

—Bueno bueno son dos caras de la misma mone-

—Bueno habéis traído la botella de agua?— todo el mundo miró a Shawn de golpe— ¿Qué? Tengo sed.