Cap 29

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Su Xing desahogó su ira y luego alisó los pliegues de la nota: "Ciudad S..."

La mente de Su Xing imaginó una ciudad bulliciosa a unos doscientos kilómetros de su ubicación actual. No está lejos pero tampoco tan cerca. S-city es una ciudad estándar de primer nivel y se sabe que los precios de la vivienda son caros.

El propietario podía comprar una casa tan lujosa en una ubicación privilegiada, lo que mostraba el alcance de su riqueza. A Su Xing no le sorprendió que el propietario esencialmente fuera dueño de una mansión, después de todo, ya sabía que el otro tenía dinero después de su encuentro en Beijing.

Después de que Su Xing pensara eso, la sensación de mejora que sintió esa tarde se redujo a la mitad. Porque en comparación con el dueño de la casa, él era solo una papa insignificante. ¿Cómo podrían compararse diez gallinas con una casa de primer nivel en la ciudad?

Su Xing estaba un poco frustrado y comenzó a pensar en comprar algunos patos más o criar algunos cerdos.

Dejó de lado su creciente ambición y sus pensamientos errantes. Su Xing empaquetó la comida y escribió algunas palabras para la otra parte. "Está bien, lo sé. ¿Y qué quieres cenar?"

Luego entregó la caja de comida, sin embargo, su corazón no pudo evitar preguntarse... ya que el dueño de la casa era tan rico, ¿estaría bien con comer comida casera normal?

Su Xing pensó pero no quiso pensar en una respuesta. No se podía negar que alguien que apreciara su oficio era muy gratificante para un cocinero.

Durante la cena, Yu Feng miró la nota en su palma por un momento. Además de analizar las palabras, también quería intentar discernir más información a través del estilo. Al final, no pudo ver nada de las palabras ni del papel.

"Una persona tan abierta e inocente." Yu Feng estaba quieto e inexpresivo. Alisó la nota y luego la colocó con las demás en una pequeña caja de té.

El jefe recibió una nueva nota hoy y la guardó cuidadosamente, notó que el ángulo no era el correcto así que jugueteó antes de devolver la caja a su lugar.

La cena de hoy no contó con las azufaifas y las bayas de goji que le desagradaban, pero aún así fue muy ligera, aunque las costillas de anoche sabían dulces y no eran de su agrado, para bien o para mal eran carne.

En cuanto a la comida de hoy... Rebuscó entre las verduras blanqueadas con sus palillos. ¿Dónde está la carne? Miró durante un rato antes de notar un cuenco del tamaño de la palma de la mano. Agarró las dos hamburguesas de carne del tamaño de un huevo que había dentro. De un trago.

Después de terminar de comer, su estómago no estaba satisfecho pero el pequeño cuenco estaba vacío. Dejó suavemente los palillos y miró seriamente el cuenco de avena vecino.

Los empleados de la empresa que lo reconocieran sabrían cuando apareciera esa mirada, cualquiera que estuviera a cinco metros de Yu Feng tendría mala suerte. En ese momento, todas las personas huirían lejos para evitar que el jefe les diera una lección.

Pero en este momento, no había nadie en un radio de cinco metros en la casa. Además, la persona objetivo puede existir o no. Yu Feng lo tenía claro, así que solo expresó su frustración. Relajó los hombros y silenciosamente comenzó a comer. verduras ligeras y gachas blandas.

Media hora más tarde, Su Xing terminó su cena y se acercó a lavar los platos. Se dio cuenta de que el dueño de la casa había terminado. La caja de comida y la vajilla estaban limpias y había una breve nota.

"Quiero comer carne para la cena". Su Xing leyó el mensaje en negrita y cursiva. Arrugó las cejas avergonzado. La otra parte había estado en el hospital ayer por dolor de estómago.

He pagado demasiado por esta casaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora