𝐒𝐓𝐘𝐋𝐄 [𝐓𝐡𝐞 𝐕𝐚𝐦𝐩𝐢𝐫𝐞 𝐃𝐢𝐚𝐫𝐢𝐞𝐬]

𝐈𝐈: 𝐃𝐢𝐝 𝐈 𝐬𝐮𝐫𝐩𝐫𝐢𝐬𝐞 𝐲𝐨𝐮, 𝐖𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲?

𝐂𝐔𝐀𝐍𝐃𝐎 𝐌𝐀𝐑𝐘 𝐄𝐑𝐀 𝐏𝐄𝐐𝐔𝐄𝐍̃𝐀, tenía una ligera obsesión con acompañar a su madre a comprar, era una cosa ilógica que ante los ojos de sus padres significaba un camuflaje para poder estar siempre de la mano de su amorosa madre, sin embargo, la realidad era completamente diferente.

La ultima vez que Mary fue obligada a comprar con su  madre, se quedo encandilada mirando un precioso anillo de plata formado por pequeñas estrellas hasta una abertura en un extraño cofre con ramas pinceladas en el, Lilith se alejo de ella unos pasos para saludar a Liz.

Y la pequeña pelirroja estaba tan embelesada con dicha joya, que no se dio cuenta que una joven rubia de facciones amables la observaba sonriente, emocionada por haberla encontrado, acercándose a ella hasta que Mary se vio a si misma y a la desconocida amable en el reflejo del aparador provocando que gire su cabeza rápidamente en su dirección con un leve ceño fruncido en su tierno rostro.

—¿Te gusta? —Habla amablemente la rubia, recibiendo un asentimiento desconfiado.

Mary observa con atención como la desconocida saca una de sus manos del bolsillo de su chaqueta, haciendo movimientos circulares en el aire hasta que una extraña luz morada saliendo de sus yemas provoca su asombro y atención absoluta.

Con una sonrisa emocionada, la joven mueve dichas luces hacia el anillo. Mary no recuerda bien cómo paso, pero en un segundo ese brillo morado estaba sobre el objeto detras del aparador y en el otro ya no estaba y dicho objeto se encontraba en la mano de la chica frente a ella, quien junto sus manos, para después dejarle el anillo en su pequeña mano, mostrándole que en la oscuridad, seis de las doce estrellas, brillaban en una luz celeste.

Luego de eso, acompañar a su madre significaba volver a encontrarse con ella y ver más cosas como esas. 

Por lo que en desconocidos respecta, Mary es demasiado propensa a seguir hablando con ellos a escondidas. Sin embargo, existe solo una persona a quien si le diría que hablo con un desconocido, y es justamente su mejor amigo, Max, quien ahora mismo le esta dando la regañada de su vida por darle su numero de teléfono al pelinegro de la noche anterior.