Oficial

27 2 0
                                    

El perro y el lobo se revolcaban por el césped, dándose besos salvajes, y soltando gemidos suaves.

Sólo les importa el cuerpo del otro, se olvidaron de que sus amigos estaban detrás de un arbusto; tal vez se olvidaron de que estaban en los terrenos de Hogwarts, tal vez solo querían disfrutar del otro, y olvidarse de todo lo demás.

Pero la cosa no llegó a más que besos en los labios, cuello y pecho, sumado a algunas caricias en el abdomen, por debajo de la ropa. Se detuvieron porque Remus se cansó luego de un rato, ya que la última luna llena lo había dejado como un trapo, no tan herido, pero muy agotado, y aunque había sido hace una semana, todavía se notaban las secuelas.

—Basta... Sirius ya, no quiero más —Dijo Remus, tirando a Sirius, que estaba encima suyo, hacia un costado. Sirius estaba transpirado, muy caliente, y excitado. Observó confundido, a Remus.

—Si, si... perdón —Murmuró Sirius, apenado, y acariciando la mano de Remus.

Ahora, ambos estaban acostados, uno junto al otro, admirando las estrellas, y simplemente escuchando las respiraciones del otro.

—Padfoot, ¿Ahora qué somos? —Preguntó Remus, sin perder la concentración por las estrellas.

—¿Novios?

—Nunca me lo pediste, o viceversa —Dijo el castaño, provocando una sonrisa pícara en los labios del pelinegro quien lentamente se sentó, y lo miró.

—Remus John Lupin, ¿Me darías el honor de ser mi novio? —Preguntó el ojigris, acercándose a sus labios, y olfateando cada parte del rostro de Remus.

—Por supuesto... —Susurró, y cerró los ojos, permitiéndole a Sirius, dejar un dulce beso en sus labios. El beso acabó con Sirius acurrucado en el pecho de Remus

—Ya es oficial, yo soy tuyo, y tú eres mío....
—Dijo, jugando con su mano, y luego besando el dorso de esta.

—Te amo, Padfoot.

—Y yo a ti, Moony.

WolfstarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora