Capítulo 2: Pacíficos días antes de la tormenta.

382 31 35
                                    

Crédito al autor de DxD a Ichiei Ishibumi y a los respectivos creadores de las franquicias que usamos

Esto lo hago junto a Metatron9310 y la nueva adquisición al grupo cel12152001

En algún lugar oculto en el Caribe.

Uno de los fenómenos mas hermosos de la naturaleza, cuando algunos organismos microscópicos bioluminiscentes se reúnen en suficiente cantidad, las olas se iluminaban de un tono azul turquesa, pero este día se conjugo con otro juego de luz, medusas de un rojo bioluminiscente nadaban muy cerca de la superficie, parecía un ondulante campo de rosas rojas, bajo una vista perfecta de la Vía Láctea.

-Y esa es la constelación de Cetus, la creatura marina que iba devorar a la princesa Andrómeda- Ingvild señalo en el cielo mientras estaban recostados en la balsa.

Issei e Ingvild disfrutaban de su luna de miel desde hace un par de días, una isla escondida en el caribe solo para ellos y algunos gólems que les servirían en todo lo que necesitarían o desearan, había sido así las ultimas nueve semanas, el día de la llegada, 5 días con cada una de sus chicas antes de la siguiente boda, el día de retirarse y luego una boda, así estuvo por poco menos de tres meses, con Rias estuvo en un viaje por Japón a los mas hermosos lugares turísticos, Akeno lo tuvo para ella solo en una isla en Hawai donde pasaron mas tiempo en la cama que en otro lado, Asia, Irina y Xenovia eligieron ir por Italia, España y México viendo la hermosa arquitectura colonial, Rossweisse un viaje a un glacial en invierno donde se podía ver la aureola boreal, Kuroka y Roygun eligieron un viaje a Los Ángeles y Miami respectivamente, ahora disfrutaba un tranquilo descanso de tanto ajetreo con Ingvild, era relajarse antes del viaje que harían la siguiente semana con el resto de las chicas. Mientras la peli morada moldeaba animales marinos con las aguas llenas de creaturas luminosas, Issei deslizo su mano en la de ella, entrelazando sus dedos para moldear un intimo momento entre ellos.

Ambos amanecieron con el graznido de un pelicano, se habían quedado tan dormidos que la pequeña balsa se alejo de la costa, por la altura del sol a su derecha apenas amanecía, al voltear a Ingvild, esta estaba cálidamente dormida a su lado, invoco dos Wyverns y les ordeno arrastrar la balsa a la orilla mientras dormían.

-Buenos días cariño- Issei saludo con una sonrisa mientras la llevaba en brazos a la cabaña donde se quedaban.

-Buenos días esposo- Ingvild respondió mientras se acomodaba contra su regazo.

En la cabaña, se sentaron a desayunar mientras veían las olas del mar romper contra la orilla.

-Bueno si fuera posible tener un bebé en el futuro, ¿te gustaría tener un niño o una niña?- Issei pregunto de repente.

-¿Hm?-

-Un niño o una niña, ambos están bien y quiero que nazca sano, eso me haría muy feliz, ¿Qué quisieras que fuera nuestro primer o primera bebé?-

-Aunque lo amaría de la misma forma supongo que prefiero que mi primer bebé sea una niña- Ingvild contesto.

-Tienes suerte por tener tu deseo asegurado verdad- Issei sonrió mientras acercaba sus labios a los de Ingvild.

Monte Meru, territorio Hindú.

Monte Meru, territorio Hindú

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
High School DxD: Galaxy: RebuildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora