Abran paso a Midoriya Izuku: El Kasumi Hashira

Capítulo 3

Toshinori estaba a menos de 5 minutos de llegar al Parque municipal de la playa de Takoba. Su plan era ayudar al joven Midoriya a ganar algo de músculo. Porque por mucho que desee intentar estar en el curso de héroes sin una peculiaridad no lo podía hacer con un cuerpo que parecía una ramita. Está playa había acumulado basura durante años. Si lograba hacer que Midoriya ganara algo de masa muscular limpiando está playa podría pasar a la siguiente fase del entrenamiento: el entrenamiento con katana. Basándose en lo que vio en el ataque del villano de lodo y lo que le contó el chico sobre su vida pasada, había altas posibilidades de que el joven Midoriya se vuelva un prodigio con la katana en esta nueva vida.

Cuando llegó no esperaba ver al joven Midoriya en el lugar. Parecía que estaba meditando. No daba signos de querer exhalar el aire que mantenía en sus pulmones. Después de unos segundo no pudo seguir reteniendo el aire por lo que exhaló de manera tan brusca que terminó tosiendo un poco. Toshinori se acercó con rapidez para ver cómo estaba.

– Joven Midoriya ¿Te encuentras bien? ¿Cómo te sientes? ¿Puedes respirar? – Soltó todas esas preguntas asustado por la salud del chico.

– Tran...Cof, Cof... Tranquilo Yagi-san. Estoy...Cof...bien. – Le asegura el chico. Cuando volvió a respirar a la normalidad continuó. – Estaba tratando de retener el aire la mayor cantidad de tiempo posible.

– ¿Eso tiene que ver con tu estilo de respiración? –

– Más o menos. Ahora estoy tratando mejorar la capacidad de mis pulmones. Una vez que la capacidad de mis pulmones mejore, pasaré a practicar con la Zen Shūchū no kokyū (Respiración de Concentración Total). Además, contener la respiración por largo periodos de tiempo es la mejor forma que tengo disponible para regular mi respiración porque no tengo a la mano una montaña con trampas.–

– ¿Una montaña? ¿Con trampas? ¿Para qué quieres eso? –

– Si sabes que mientras más alto estás en la montaña, menos oxígeno hay ¿Verdad? – Yagi asintió con la cabeza. – Es principalmente una prueba. Además, que entrenar en una montaña con trampas es beneficioso para los cazadores de demonios por varias razones: 1) Las trampas los ayudan a estar atento a su entorno. Si no son conscientes de lo que los rodea más altas eran las posibilidades de morir no solo para el cazador sino también para las personas que lo rodean.

Yagi tuvo que darle la razón al joven Midoriya. En el campo de héroe siempre se tiene que prestar atención de lo que lo rodea. Era el deber del héroe atrapar a los villanos y mantener a salvo a las personas. Si solo se enfocaba en el villano era posible que este pudiera lastimar a los inocentes y eso le daría la victoria. Si solo se enfocaba en proteger a los inocentes las probabilidades de que el villano abandone la escena eran altas y también le daría la victoria.

– 2) Trabajar bajo presión: El objetivo de las trampas es retrasar a las personas que hacen la prueba ósea menos tiempo. Los cazadores trabajan con el tiempo. Si no puedes bajar la montaña lo más rápido posible antes de que amanezca, estarás muerto si estás en el campo. Los demonios siempre escapan cuando empieza a salir el sol, una de las grandes debilidades de los demonios, por lo que el deber de los cazadores en matarlos antes de que maten a los civiles o a sus compañeros. Mientras más rápido mejor. – Yagi se dio cuenta que la misma lógica se aplica en los villanos, pero no interrumpió al joven. – 3) Preparar el cuerpo: Los humanos necesitamos del oxígeno para vivir. La parte superior de las montañas tienen poco oxígeno por lo que la persona no solo debe saber usar el poco oxígeno que tiene sino también debe de aprender a controlar las emociones. Es un entrenamiento tanto físico como mental. Sé que es repetitivo, pero si no lo haces puedes acabar muerto. Los Iku shu (Los cultivadores) son los encargados de poner a prueba a los nuevos reclutas. Si no pasan la prueba es posible que no puedan enseñarles sus Kokyū Hō (Estilos de Respiración).