Hyunjin al escuchar que la campana sonaba recogió todos sus libros de manera apurada, salió del aula y guardó sus cosas en el casillero. Aunque todo el día se la pasó con sueño sabía que si llegaba a tiempo podría dormir junto al menor, ya que este se lo había prometido en la mañana.
Los leves delirios de un enamorado hacían que todo el mundo cambiara de tonalidad, perdido en las ilusiones y con aquellos luceros de pintor brillando como faroles, cosas que solo una persona con el corazón atado a un amante solo podía describir.
Esos sentimientos que hacían sentirse con vida por primera vez lo hacían querer quedarse y volver a sentir que todo seguía cambiando a mejor, pero una gran parte de él seguía deseando regresar a la arena.
Aun así esos hilos enredados eran cortados por el mismo, no quería seguir recordando que su tiempo estaba contado, como el de todos. Corrió fuera de la universidad y llegó lo más antes al apartamento, notando que el menor aún no llegaba, para hacerle tiempo este fue a su habitación a cambiarse de ropa, hacía frío así que prefirió algo holgado y cálido.
La paciencia era un martirio, cuando la mente y el corazón están enlazados entre hilos rojos por un amante el tiempo parece eternidad, como todo en el ambiente cambiaba de tan solo saber que el dueño de los delirios.
Sentimientos eternos en el reloj del tiempo, el amor florece, un lazo eterno que el corazón merece. Susurra el viento secretos profundos,
Mientras latidos y sueños se hacen fecundos.Sentimientos danzan en un vals suave, como hojas de otoño que el viento trae. El amor es un eco en el alma grabado, un tesoro en el tiempo, jamás olvidado.
El tiempo avanza con pasos ligeros, cambiando estaciones y momentos sinceros. Más el amor perdura, desafiando la hora, un faro en la noche, una llama que aflora.
A través de los años, el amor resiste, tejiendo memorias con hilos de vida en penumbra. En el teatro del tiempo, es el protagonista, la fuerza que une lo frágil y lo artista.
Así, entre los latidos del reloj y las estrellas, el amor y el tiempo entrelazan sus huellas. Sentimientos profundos, eterno abrazo, un poema en el alma, donde el amor trazo.
El tiempo era oro, los sentimientos eran indelebles, y el corazón cada vez dolía más, por cada emoción por cada desilusión aquellas viejas rupturas curadas a agua salada y arena, se sentía cada vez más vivas.
"Oh no, estás cayendo por amor."
Pensó Hwang al darse cuenta de que literalmente había salido apurado de sus clases solo por una promesa que de seguro el menor lo dijo para que él se levantara. No sabía cuando odiaba volver a caer, enamorarse de nuevo, pensaba que el plan estaba saliendo como él quería, pero los suaves hilos rojos atados al rededor de su corazón y alma buscaron su propio enlace, donde volver a conectar con otros hilos.
Hyunjin al escuchar la puerta abrirse salió de sus propios pensamientos, iba a salir de su habitación al escuchar al menor en una llamada, solo le presto atención a ella.
— Mamá, ya sé que me voy en diciembre, ¿No hay manera de que el programa me deje aquí por más tiempo?...
Al escuchar la contestación por el otro lado de la línea este suspiró.
— No quiero regresar a Australia. Estoy cansado de moverme de lugares, quiero quedarme aquí, me encanta este lugar.
La voz al otro lado de la línea le negó cada deseo, haciéndolo sentir un nudo en la garganta, este solo intento no escucharse con la voz quebradiza.
— ... Okay, te veo en cuatro meses entonces...
Este colgó la llamada y suspiró, paso sus manos por sus ojos quitando aquellas lágrimas que atentaban con salir.
En la oscuridad de la noche, el miedo se cierne en silencio, un fantasma de preocupaciones, un eco frío y tenaz. Se arrastra como sombra en el alma, sembrando dudas en cada rincón, yen los latidos del corazón, susurra su canción.
Las preocupaciones crecen como hierba en primavera, tejiendo redes de incertidumbre, tejiendo una espera. El futuro es un lienzo en blanco, lleno de miedos por pintar, y el corazón late rápido, sin saber cómo enfrentar.
Pero en el refugio del ahora, podemos encontrar la calma, desafiando al miedo, dejando que el presente transforme su alma. Cada paso que damos, cada decisión que tomamos, es un acto de valentía, un mensaje al miedo que quebramos.
Sin embargo, la necesidad de sentir que esto no era momentáneo, sino para siempre, ocultaba sus verdaderos sentimientos, dejándolos en un rincón aislado, donde aquella caja de miedos se llenaba cada vez más de polvo y dejada en el olvido.
El mayor atrás de aquella puerta sentía que el tiempo era tan corto, su corazón acelerado y aquellos pensamientos enredados empezaban a dejar caer arañas de dudas, acechando con hacerlo romper aquellas heridas, hacerlo sangrar de miedo, sintiéndose que quería cambiar el final.
¿Por qué todo en la vida de Hwang Hyunjin iba en picada? Cada cosa que él encontraba desaparecía o lo traicionaba, odiaba ser un ángel caído, que aquella obscuridad de la noche lo perseguía siempre y que cada vez el cielo se volvía gris al verlo bien, odiaba que todo siempre se volvía tenue, que aquella pintura brillante se volvía obscura y llena de dudas.
Este salió de sus pensamientos al ver como la puerta de su habitación se abría, al ver los luceros de aquel chico sintió como su corazón le pedía a gritos tenerlo junto a él por más tiempo, era incapaz de soltar aquellos nudos que había provocado el menor.
— Ah, pensé que seguías en la universidad...
El menor sonrió y se acercó a Hyunjin abrazándolo, seguido dejó un leve beso en las mejillas de este.
— Me prometiste algo...
— Ey, yo si cumplo mis promesas
Este sonrió haciendo que esa misma sonrisa se contagiara en el rostro del mayor. Luego de unos minutos Lix se cambió de ropa, fue a la habitación del mayor y se acostó al lado de este, del bolsillo de su buzo sacó la pulsera que le había hecho al mayor.
— Mira, es para ti, la hice con colores suaves para que no llame la atención...
Hyunjin la tomó y la colocó en su antebrazo, amaba lo bien que combinaban los colores de aquella pulsera. Lix apartó la manga de su buzo y apegó su mano con la del mayor, dejando ver que entre ellas combinaban los colores.
El mayor sonrió y seguido beso de manera suave al menor en sus labios, amaba aquel sentimiento cálido que le dejaba el menor.
— Si habrá una siguiente pulsera, quiero que lleve cada cosa que ames y te guste, así siempre llevaré un pedacito de ti a donde vaya. Y no importa que tan brillante o llamativa sea, quiero que sea un pequeño recordatorio de que te tengo junto a mí ¿Puedes?...
Lix sintió como todo al rededor de él se tornaba a ser color destellante, este solo asintió con una gran sonrisa en su rostro, seguido abrazo al mayor.
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Ns xq lloré con lo q dijo Hyunjin (quiero q m digan eso cn algo q regale a alguien)
Tay t amo gracias por la inspiración del día d hoy, amén. Cn Nothing New en bucle, dios amo a Tay.
Iiii lof u a todos, los veo otro díaaa ☆⋆!
Gracias por leer tq a todos 🤎!
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Bad Idea
FanfictionUna tentación, una necesidad. ¿O simple curiosidad y placer? ¿Porque te gustan los chicos? Fue una mala idea llamarte. Fue una mala idea, porque incluso ahora estoy más perdido que antes. Fue una muy mala idea. Fue una mala idea, pensar que podría...