Hearing

128 14 5
                                    

"La verdadera escucha va mucho más allá de la percepción auditiva. Es el emerger de una atención alerta, un espacio de presencia en el que las palabras son recibidas"

-Eckhart Tolle



Donde Robleis, después de una pelea
con sus padres, se escapa y corre a la casa
de su mejor amigo



Ni siquiera miraba por donde corría y aunque quisiera sería imposible debido a las lágrimas que nublaban su vista

Aunque tampoco le hace falta, bien sabe que ha hecho tantas veces ese camino en ese estado que hasta su cuerpo se movía solo por esas calles encharcadas por la lluvia que caía en ese momento

Ya no soportaba más. Lo intento varias veces para que sus amigos o compañeros no se preocuparan de su (constante) poco ánimo o cuando el maquillaje y las vendas no podían tapar los moretones creados por sus supuestos padres

Así que después de una fuerte discusión con aquellos adultos y acabar con un labio partido y una marca roja en su mejilla derecha, corrió a su habitación, trabó la puerta con llave y empacó sus posesiones importantes y algunas prendas para poder escapar por su ventana de su presunto hogar, a pesar de que nunca se sintió como tal

Y así llegó a dónde está ahora. Delante de la puerta que ya conocía bien, sin querer tocar aún cuando sabe que le abrirá la puerta de todos modos porque ya se lo ha hecho saber en cada visita

Justo cuando se atrevió, la entrada se abrió dejando ver a un chico portando un chubasquero y paraguas en la mano con una expresión preocupada que, al cruzar ambos miradas, se agravó aún más

No le dió tiempo ni a saludar. Estaba tan cansado física y emocionalmente que solo pudo caer en los brazos de su amigo y llorar en ellos, finalmente desahogando todo como hacía recurrentemente con él

Acto seguido, los dos entraron a la casa y el híbrido cerró la puerta con su pie para luego separarse y poder observar la cara dañada de su contrario

Lo llevó al baño para que se pudiera duchar y entrar en calor después de estar bajo la lluvia portando no más que una camisa negra, le prestó uno de los suéter que se había dejado en una de sus miles de visitas y ahora se encontraba curando su labio que en ningún momento dejó de sangrar y su mejilla que empezaba a hacerlo

-¿I-ibas a algún lado ahora y te interrumpí?- preguntó con la voz poco quebrada

El de ojos verdes negó para luego agarrar su móvil y buscar algo en él para luego enseñarle al castaño oscuro

Rob ♡

Eu, amigo, ¿todo piola por ahí?
19:30

¿Amigo, estás bien?
19:45

Me estás preocupando, ¿pasó
algo con tus viejos?
19:57

Me acabo de preparar, voy a
buscarte ahora mismo a tu casa
20:02

-Perdón por preocuparte, no quería tener el celu a mano por si mis viejos me escribían o llamaban- dijo avergonzado mientras su contrario negó con una sonrisa tanto aliviada como nerviosa

El menor empezó a guardar las cosas en su pequeño botiquín cuando terminó de desinfectar y curar el labio roto, y haber puesto una gasa en la mejilla. Se levantó para dejarlo en la mesita del cuarto y volvió con su amigo para abrazarlo con cariño

Su amigo era el único con el que podía hablar abiertamente sobre todo su mundo

Cualquier otra persona de su entorno le diría que hay gente pasando por peores cosas, que solo quería llamar la atención o cosas parecidas

Carre nunca haría eso. Incluso si pudiera hablar, nunca lo haría

Él lo escuchaba mejor que nadie porque sabía que nuca le juzgaría o le dejaría tirado a su suerte

-No aguanto más, Carru- agregó dolido mientras sentía que se formaba un nudo en su garganta-. Mi vida es una puta mierda, ya no sé qué más hacer para recibir un poco de amor de alguien

El de ojos verdes solo pudo empezar a acariciar el hermoso pelo largo del mayor mientras escuchaba su desahogo

Todas las veces que lo hizo se repetía a sí mismo que un chico como él no se merecía lo que vivía constantemente y por eso estaba para él siempre que necesitaba que alguien dejara de hablarle y empezara a escucharle

-Encima te he metido a ti en esto- el de azul paró de tocar su pelo para mirarlo desde arriba confuso-. Siempre recurro a ti cuando me siento vacío, vos no te merecés esto, vos te merecés a alguien que esté para ti y no alguien que necesite de ti cada vez que se siente como... s-si no debiera existir

El nudo en su garganta le hacía aún más difícil evitar llorar y respirar tranquilamente y, en vez de eso, soltaba jadeos desesperados. De repente, sintió como el pecho en el que estaba recostado se apartaba de él

Antes de que pudiera pensar lo peor, dos manos se colocaron en ambos lados de su cara y los pulgares limpiaron las lágrimas que volvían a amenazar con salir. Alzó la mirada encontrándose con esos lindos ojos verdes que nunca lo miraron con desprecio o desdén

Bajó un poco su punto de vista para ver los labios del menor. Era una de las partes favoritas de la cara de su amigo. No por una razón en especial, piensa él, solo le parecían cautivadores

Volvió a levantar la mirada para encontrarse de nuevo con esos ojos que ahora miraban lo mismo que admiraba antes en él. Ambos sabían que los dos tenían ganas de que pasara pero ninguno se había atrevido a dar un paso más allá del límite

Ninguno se había atrevido hasta ese momento en el que el híbrido no aguantó más y cortó la distancia entre ellos atrayendo su cara con sus manos. El de ojos marrones correspondió después de unos segundos posando sus manos a mitad de la espalda del menor y así intensificar el beso

Duraron unidos unos pocos segundos para después juntar sus frentes con los ojos aún cerrados y escuchando las respiraciones del otro en busca de aire para poder volver a unirse nuevamente en un nuevo beso

Beso en el que se demostraban palabras, sentimientos e ideas que no hacía falta contar o escuchar, solo se necesitan transmitir

SᴇɴsᴇsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora