La Bóveda

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"Ser un héroe con la mente enredada en pesadillas, es luchar en un mundo donde la línea entre la realidad y el horror se desdibuja, y cada victoria posible victoria se convierte en un momento de tensión que suele desgarrar el alma

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"Ser un héroe con la mente enredada en pesadillas, es luchar en un mundo donde la línea entre la realidad y el horror se desdibuja, y cada victoria posible victoria se convierte en un momento de tensión que suele desgarrar el alma."

Capítulo 6

Ser un héroe generalmente estereotipada como una persona que realiza acciones valientes y altruistas para ayudar a otros y hacer el bien en situaciones difíciles o peligrosas. Los héroes son admirados por su coraje, su generosidad y su capacidad para tomar medidas para hacer del mundo un lugar mejor. Sin embargo, es importante tener en cuenta que ser un héroe conlleva una serie de responsabilidades y desafíos.

El concepto de "el poder conlleva una gran responsabilidad" se ha vuelto icónico gracias a Spider-Man, pero es aplicable a muchas historias de héroes, completamente inéditas. Porque el significado sigue siendo el mismo: Aquellos que tienen habilidades o recursos excepcionales tienen la responsabilidad moral de usarlos de manera ética y para el bienestar de los demás. 

Por eso, los héroes a menudo enfrentan dilemas éticos y deben tomar decisiones difíciles para equilibrar sus responsabilidades y los riesgos asociados con sus acciones.

Pero, en una mente fragmentada, donde diferentes identidades pueden coexistir en la misma persona, el concepto de ser un héroe y tener poder puede complicarse aún más. Cada identidad puede tener su propia percepción del bien y el mal, lo que podría dar lugar a conflictos internos y decisiones contradictorias. Esto podría llevar a una falta de coherencia en las acciones y decisiones de la persona, lo que podría aumentar los problemas en lugar de solucionarlos.

Por eso, al final, aunque tengas el poder para hacerte llamar y sentirte como un dios, debes saber que dentro de la mortalidad humana y su propio funcionamiento biológico, las células de tu cuerpo y los pensamientos etéreos de tu corazón, clamarán siempre por ayuda, si saben que la necesitan, aunque tu boca y tus acciones se nieguen en aceptarla.  

Todos lo que había acontecido en 24 horas, estaba consumiendo el pueblo de Brookside. Este se encontraba en un estado de desolación y tristeza, que acompañado con las nubes torrenciales y grises en el cielo, más la lluvia ligera que caía, hacía del lugar el escenario perfecto de un poema de Edgard Allan Poe. La noticia señalaba que habían sido, hasta ese momento, veinte asesinatos, incluyendo el de Emma y del padre de Emma, George, en Bucarest, quienes lo encontraron en el sótano de su antiguo hogar, el cual tenía cuatro años desaparecido.

Rachel, por su parte, lloraba inconsolablemente, incapaz de comprender cómo el monstruo había estado siempre frente a ellos. Recordaba las veces que había salido con Clara, sus amigas y todas las fiestas infantiles a las que habían asistido. Clara siempre se mostraba amable, cariñosa, radiante y llena de vida, sin que nadie sospechara que cada visita y salida podría haber sido la marca de una posible presa.

La noticia de que Clara era el monstruo se propagó rápidamente por el pueblo. Lo más extraño de todo fue que Clara se entregó voluntariamente, llorando y gritando desgarradoramente, con su cuerpo ensangrentado y sosteniendo el cuerpo de Emma. Admitió que lo había hecho, pero afirmaba no saber cómo había llegado a cometer semejante atrocidad.

El Monstruo en el EspejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora