La reina oscura (PAUSADA)

capitulo 5

Sueños o ¿Recuerdos?.

Eloise.

—El nunca nos ha querido, Eloise y... y nunca lo hará.

—Eso no es cierto, él nos ama y tú lo sabes.

—No, Eloise entiéndelo de una vez, él jamás nos querrá porque no somos dignos de él.

—Deja de decir eso, Lucas él si nos ama y yo te lo voy a demostrar.

Mi cuerpo está en completa quietud.

Siento que todo se mueve despacio, cómo si hubieran puesto todo en cámara lenta, cómo si no estuviera en este plano terrenal.

Trato de levantarme de la cama y no puedo, es como si me estuvieran sujetando.

Todo está en la mente.

Tú eres mi conciencia, deberías ayudarme.

Lo estoy intentando.

¿Y de que forma?.

Te estoy hablando para que te puedas levantar.

Conciencia inútil.

Decido quedarme quieta para que mi cuerpo se relajé y pueda levantarme tranquila. Pasan un par de minutos y está vez si logro levantarme, mi respiración está agitada y mi cuerpo un poco adormecido. Jamás me había sentido de esta forma, cómo si estuviera viviendo en un sueño.

Miro la hora en el reloj que está en la mesa junto a la cama, 02:33 a.m.

Me dirijo a la ventana de la habitación y a través de ella se ve toda la ciudad sumergida en la gran noche, tan imponente, tan única. Decido ir al baño a tomar una ducha para relajarme un poco más porque siento que algo dentro de mi no está bien.

Tardo unos segundos en terminar de quitar mi pijama y luego entro en la ducha, dejo caer el agua caliente sobre mi cuerpo por unos minutos. Ahí, quieta, sin ver a ningún lado mi mente comienza a traer de vuelta los recuerdos de aquel sueño.

"Deja de decir eso, Lucas el si nos ama y yo te lo voy a demostrar ".

Lucas.

¿Quién es Lucas? ¿Por qué está en mi mente?.

Preguntas a las que no les encuentro ninguna respuesta. No sé porque soñé eso y mucho menos de quién podría ser ese nombre.

Jamás en mi vida había escuchado ese nombre, solo en ese estúpido sueño.

¿Realmente era un sueño?, No lo sé y la verdad es que ahora no tengo tiempo para eso, no quiero que mi mente se descontrolé más de lo que ya está.

Cierro la llave y decido salir para tomar una toalla, comienzo a secar mi cabello y sin poner nada alrededor de mi cuerpo decido regresar a la habitación y una vez allí me dirijo nuevamente a la enorme ventana, la vista es extremadamente hermosa.

Siento la presencia de alguien y al voltear me doy cuenta que es Sebastián. Él está allí, con un pijama color negro que hace contraste con su cabello, en medio de la oscuridad parece un ser de otro mundo.

Su vista baja y me recorre el cuerpo entero causándome un escalofríos muy extraño, me doy cuenta de que no traigo nada de ropa, por instinto dejo caer la toalla al suelo y me cubro con ambas manos. Una pequeña sonrisa se forma en sus labios y luego habla.

—Me parece que ahí — señala mis pechos —no es donde deberías de cubrirte, tendría que ser allí — dice mientras su mano me señala.

De inmediato tomo la toalla nuevamente y me la coloco alrededor del cuerpo. Ni una sola palabra sale de mi boca, no se si es por qué me acaba de ver desnuda o por el simple hecho de que él ha entrado a mi habitación sin antes tocar.