EL DONCELL

583 52 17
                                    

.

.

.

Todos le temen, ¿la razón?, desde hace un buen tiempo su figura dejó de ser vista como un omega con aires de alfa, para que el reino entero lo llamara y proclamara como su dueño y señor.

Hyunjin desde que tuvo su primer celo, huyó, su familia lo escondía entre los bosques del reino lobuno, en la parte más lejana y espesa de este bosque, obviamente buscó refugio, intentando de todas las maneras posibles pasar desapercibido, pero vamos que su aroma era demasiado fuerte, solía ser muy ligero antes, sin embargo, llegó su adultez, 18 años ya, tenía que ser descubierto por alguien, fue así que huir a otro reino en dónde fuera un completo desconocido, se volvía una mejor opción de supervivencia a esto.

Mala idea para un enigma de especie lobuna.

Los lobos no se llevan bien con los felinos, como esa pelea eterna entre perros y gatos, no hay siquiera sentido en ello. Resentimiento quizás.

¿Necesidad?

Nadie lo entendía, ni el Rey o Hyunjin, los niños o ancianos tampoco.

Oh, recordar al rey Lee era vergonzoso, tanto porque cada que mencionan su nombre, las sirvientes lo miran o con pena o con miedo, a veces con desprecio, Hyunjin no le ha hecho daño a nadie, no se cree capaz de hacerlo.

¿Amigos?, nunca hizo uno, su vida era escapar por no ser matado y ya.

No merecía ser tachado así.

"El juguete del Rey", así lo llamaban para burlarse de él.
¿Porqué odiaban tanto a algo que temían?

Sus pensamientos contradecían muchas cosas al respecto, no solo la forma de ser tratado. Que por ahora es de la mierda. Los guardias lo han rebajado de la peor manera innumerables veces.

"¿Una bestia siendo amable?, quién lo diría"

"¿La bestia sabe hablar?"

"No creo que le duela, sino tiene sentimientos, solo instinto animal"

Bueno, quisiese enojarse y comportarse agresivo en ciertas situaciones, pero recuerda que eso sería una amenaza al reino, está contra la espada y la pared.

Su vida no puede ser como la de una persona promedio, está llena se reglas que obedecer o si no, la bestia debería ser sacrificada.

De repente tocan la puerta, su habitación no es tan grande, es acogedora, pero no es un hueco o una celda, que era lo que esperaba desde el principio.

Solo conoce la celda cuando su celo llega, cuando eso pasa, obligatoriamente baja a ese oscuro lugar, lo sabe, ya ha estado ahí, le dicen que es por su bien, y por el de los demás, que es necesario apresarlo, que es por la seguridad del reino que durante esas 24 horas esté completamente inmóvil.

Encadenado y con un bozal que usan para ponerle en la boca a las bestias con colmillos como él. Nuevamente acepta resignado su desafortunado destino.

La puerta es abierta.

Saca su cabeza para ver quién interrumpe en sus pensamientos.

— ¿Si?, en qué puedo ayudar — habla gentilmente.

— El celo del Rey ha llegado — su respiración se corta — se le ha ordenado a usted, que suba a su dormitorio real como acompañante del celo.

Se lo esperaba, ¿sorprendido?, para nada.

— Por favor, se le exige sea rápido, vaya preparándose, el Rey suele comportarse agresivo cuando usted demora — su tono lo tomó desprevenido — en estos momentos está destrozando su habitación como una fiera sin control.

EVIL OMEGA «HYUNHO» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora