Mr. Doctor | KookV ☆

Dos.

࣪ ︶︶︶︶ 🐹 ︶︶︶︶ ࣪ ִ

Un trago.

Dos tragos.

Tres tragos.

...

Quince tragos (?)

¿Qué tragos?

Tragos, mmmm.

Jungkook ya hacia tirado encima de la barra de un bar. Al día siguiente tenia que trabajar. Pero aún así no podía pensar en nada más que en la platica que tuvo con los chicos.

¿Buscar a alguien? Pff, no. Buscar una pareja es demasiado difícil, y más cuando todo lo que quieren de ti es sexo y dinero. Así que solo se lo das, y ya.

No cometería el mismo error... los mismos errores.

─Malditoo... Yoon ─ hipo ─ Gi. Parra ti es más fácil. Ya tienes pareja... ─ sin darse cuenta ya estaba llorando.

─Y a mi... no me quieren. ─ limpio su nariz con la manga de su gabardina. ─ ¿Es por ser padre soltero? Yo... puedo aportar más que solo meter mi pene. ─ lloró más. ─ Se que es bueno, pero...

─Disculpe, señor.

Jungkook levantó lentamente su cabeza. Su mirada no enfocaba bien debido al alcohol en su sistema.

─Ya debemos cerrar. ─ Jungkook asintió y se levantó tambaleándose un poco. Fue al sanitario rápidamente a mojarse la cara. Al fin y al cabo tenía que manejar; es un deprimido de mierda, pero irresponsable; jamás.

Saliendo del bar, se subió al auto y condujo a su casa.
Al llegar el maullido de un felino lo hizo voltear a su dirección. Era su pequeño Percy. Un gato blanco con orejas color miel y cola gris como un mapache. Y a un lado de este ya estaba su otra gatita. Aroha, una gata angora negra con manchas blancas.

─Oh... ¿Tienen hambre? ─ un chillido de parte de percy en respuesta. ─ Bien ya voy. ─ Entró a la cocina, saco un bulto de croquetas y les dio un poco a cada uno. Miró al reloj que estaba colgado en la pared. 4:17 a.m. ¿Era tan tarde ya? Bueno... ¿Temprano? ─ ¿Goro habrá comido ya?

─¿Papá? ─ la voz de su pequeño Jae en las escaleras lo hizo voltear.

─¿Qué haces fuera de la cama? Venga, a dormir. ─ lo cargo de forma dupcial y él pequeño se recostó en el pecho de su padre.

─Papá. ─ llamó, Jungkook dio un sonido gutural de afirmación para que supiera que lo escuchaba. Entró al cuarto de él menor y lo recostó en su cama. ─ Hueles feo, no me gusta.

Jungkook soltó una risita mientras lo arropaba.

─Ya no volveré a oler así. Te lo prometo. Seré un mejor padre para ustedes. Se los prometo. ─ sin querer se le escapó una lágrima.

─Ya lo eres papá. ─ y Jungkook solo lo abrazo, llorando más.

Después de apagar las luces y asegurarse de que los niños estuvieran cómodos y tranquilos, Jeon Jungkook se dirigió agotado a su habitación. Se dejó caer sobre la cama, con la mente llena de pensamientos y emociones.

Repasando los eventos del día, se sintió abrumado. Había sido un día agotador en el trabajo, con consultas interminables, cirugías complicadas y casos difíciles de diagnosticar. A pesar de su experiencia y habilidad médica, a veces se sentía impotente ante la enfermedad y el sufrimiento de sus pacientes.