Dime cómo hago | RYEJI |

Once

Ryujin no suele hacer esto, ella no se considera una persona espontánea o que hace cosas sin pensar.

Pero ella necesitaba esto, necesitaba respuestas y tranquilidad.

Desde que en la mañana abrió los ojos y en lo primero que pensó fue en Yeji.

Por puro reflejo estiro el brazo y se dio cuenta que estaba frío, claramente estaba sola en su habitación y no tardo mucho en entrar en pánico.

También reviso su teléfono y no, no había ninguna llamada o mensaje, y hasta este momento Ryujin no sabe la hora exacta en la que Yeji se fue y porque no se despidió.

Así que por eso ahora esta aquí, parada frente a una puerta de madera meditando si debería tocar o esperar.

No sabe como está Yeji, no sabe si eso fue el inicio de algo o una despedida y hay algo que duele en su estómago solo de pensarlo y no sabe que hacer.

Respira y toca la puerta, espera unos segundos pero nadie responde.

"Yeji soy yo Ryujin." no hay ningún tipo de respuesta verbal, pero Ryujin si puede distinguir algunos sonidos que vienen de dentro.

"Por favor, tengo que hablar contigo." Ryujin toca otra vez y lo intenta.

No hay respuesta de nuevo y esta empezando a perder la paciencia. "Yeji por favor."

Se escucha otro ruido dentro y la puerta se abre. La anticipación se siente dentro de ella, pero muere tan pronto como se da cuenta de que la que abre es Yuna.

"Yuna."

Ryujin intenta entrar a la habitación pero Yuna se lo impide. "Ya se que no soy a quien querías ver pero..."

"Por favor déjame hablar con ella." No quiere ser grosera, sabe que Yuna no es responsable de nada de esto, pero esta empezando a sentir una especie de frustración profunda.

Yuna levanta ambas manos frente a ella para pedirle que espere "Mira Ryujin generalmente no me meto en los asuntos de Yeji."

Ryujin respira profundamente, está segura que nada de lo que sigue va a gustarle.

"Pero es mi amiga y justo en este momento necesita tiempo." Yuna se toca el puente de la nariz. "Se lo dije a Chan y te lo digo a ti, dale espacio, déjala pensar, meditar y si cuando eso suceda ella quiere lo que sea que tenga contigo, eres bienvenida." 

Ryujin intenta no pensar que Chan estuvo aquí antes que ella, quiere gritar, decirle a Yeji que salga y hable con ella. Que no puede hacer esto después de lo de anoche.

Pero hay algo atorado en su garganta.

"Yo la quiero Yuna."

Eso es lo único que logra decir. La otra chica se acerca y le pone una mano sobre el hombro. "Lo sé, y si te sirve de algo creo que ella te quiere a ti."

La verdad es que no sirve de nada, solo hace las cosas peor. Porque de nada servirá que la quiera si no habla con ella.

Pero, de nuevo aquí Yuna no tiene la culpa de nada. "Gracias."

Yuna la mira y esta segura que no le cree nada, pero aún así asiente. "Si Ryujin, ten cuidado."

Ryujin asiente de vuelta, Yuna la mira un segundo pero al final entra su habitación y cierra la puerta.

La pelinegra queda ahí mirando la puerta cerrada unos minutos, hasta que deja de sentir que algo le oprime el pecho.

Ella puede hacer esto, solo tiene que darle a Yeji el espacio que está pidiendo.