"Mi butters" [Bunny South park]

capitulo 14

Pasaron varios días desde aquel atardecer en el que Kenny había acompañado a Butters a casa. Durante ese tiempo, Kenny había visitado frecuentemente la casa de Butters. Jugaron videojuegos, vieron películas y pasaron horas simplemente disfrutando de la compañía del otro. Sin embargo, a pesar de la intimidad compartida en esos momentos, habían mantenido su relación en secreto.

Ahora, se encontraban nuevamente en el cuarto de Butters, un lugar que se había convertido en un refugio donde podían ser ellos mismos sin preocupaciones. La habitación estaba impregnada con la esencia de ambos, y cada rincón contaba una historia de risas compartidas y momentos especiales.

La pregunta de Kenny cortó el silencio suave que los rodeaba. "¿Crees que ya es hora de decirle?", preguntó, sus ojos buscando los de Butters en busca de su opinión.

Butters sopesó la pregunta por un momento, su mirada reflejando reflexión y emoción. "Podríamos", respondió finalmente, una sonrisa tímida jugueteando en sus labios. La idea de finalmente revelar su relación a los demás era emocionante, pero también venía acompañada de un toque de aprehensión. Aunque su relación con Kenny era fuerte, sabía que enfrentarían desafíos y juicios externos al hacerlo público.

Kenny asintió, su expresión reflejando una mezcla de emoción y nerviosismo. Habían recorrido un largo camino juntos, enfrentando momentos de risas, conversaciones profundas y momentos íntimos. La idea de compartir su amor con el mundo exterior era un paso importante en su relación, y ambos lo sabían.

Butters se acercó a Kenny y tomó su mano con ternura. "Lo haremos juntos, ¿verdad?", preguntó, buscando esa conexión compartida que los había llevado hasta ese momento.

Kenny sonrió con su característica confianza relajada. "Por supuesto, pequeñin. Siempre juntos", aseguró, su voz llena de compromiso y afecto.

Los ojos de Butters brillaron mientras asentía. Habían enfrentado adversidades y dudas, pero su amor seguía siendo fuerte. Ahora, estaban listos para enfrentar el siguiente capítulo de su historia juntos. Juntos, habían encontrado consuelo, apoyo y amor en el otro, y eso era lo que importaba más que cualquier juicio externo. La confianza mutua y el vínculo que habían construido les darían la fuerza para enfrentar lo que viniera.

En ese cuarto, lleno de recuerdos compartidos y emociones sinceras, tomados de la mano, Kenny y Butters se preparaban para dar el paso hacia la luz, enfrentando juntos el mundo exterior y demostrando que su amor era real y poderoso. El futuro estaba lleno de posibilidades, y juntos, estaban listos para enfrentarlo, sin importar lo que viniera.

El sonido del llamado de la madre de Butters resonó en la casa, interrumpiendo el momento íntimo entre Kenny y él. Ambos chicos bajaron al salón, con la incertidumbre y la tensión palpables en el aire. Sabían que había llegado el momento de enfrentar la verdad, pero no estaban preparados para la reacción que iba a desencadenar.

La pregunta del padre de Butters se estrelló en el aire como un rayo, llenando la habitación de un silencio denso. "Kenny y tú son novios?", inquirió con voz severa y un tono de furia apenas contenido. La intensidad de su mirada dejaba en claro que no estaba dispuesto a aceptar evasiones o mentiras.

Butters se encontró en un dilema, con sus padres mirándolo con expectación y Kenny a su lado, con una expresión de apoyo y preocupación en su rostro. La tensión era asfixiante, y el silencio que siguió al grito del padre parecía durar una eternidad. Pero finalmente, reuniendo su valentía, Butters habló en voz baja pero firme.

"Sí", respondió, su voz temblando ligeramente a pesar de su intento por mantener la calma.

La habitación pareció retumbar con la declaración. La mirada de Chris, el padre de Butters, se oscureció aún más, una mezcla de ira y decepción. Las emociones crujían en el aire mientras su mente procesaba la verdad que acababa de escuchar.