AMOR EN MISIÓN 'Simon Ghost Riley'

Capítulo 50: Contenta contigo

Simon y yo nos despedimos del ahora molesto Soap.  No quería quedarse solo, especialmente después de saber que estaba bien. Le aseguré que lo
visitaría a primera hora de la mañana, pero tome represalias. Simon logró sacarme de la
habitación de Soap y llevarme a la mia. Me ayudó con cuidado a acostarme en la cama, asegurándose
de que cada vez que me tocara fuera como si se tratara de un vidrio frágil.
Una gran sonrisa apareció inmediatamente en mi
rostro. Ver a un hombre tan bruto siendo tan gentil y amable hizo que mi corazón se deritiera.

"Me podría acostumbrar a esto." Bromee colocando la delgada sábana del hospital sobre mi mitad inferior, mi cabeza ligeramente inclinada
para mirarlo sobre la cama, Sus pesados ojos marrones me miran
juguetonamente.

"Tienes suerte." Él sonrió por un breve momento antes de negar con la cabeza.

"¿Por qué dices eso? ¡Eh". Lo empujé levemente. Se sentía como si hubiera pasado tanto tiempo desde que pude burlarme de él, joderlo o simplemente enviar mi sarcasmo hacia él.

"Humm.." Fue el único sonido que salió de su boca. Su mano se levantó lentamente para apartar los
pequeños cabellos de mi vista.

"¿Qué tan fuerte te golpeaste la cabeza? Eres tan.. Me encanta". Tarareaste, cerrando los ojos por un
breve momento.

"Ya terminaste?" Resopló intentando con todas sus fuerzas no dejar que aflorara una sonrisa, Deje escapar una breve risita mientras dejaba que mi cabeza golpeara la cara de la almohada. Mis ojos miran fijamente el techo blanco sin emociones hasta que
siento que la cama debajo de mi se mueve hacia la izquierda. Mi cabeza se giró en la dirección para ver a Simon plantándose en el pequeño espacio a mi lado.

"¿Te importa?" Pregunté deslizándome hacia la derecha para darle más espacio para que encaje
cómodamente. Le fruncí el ceño y empuje mi hombro hacia él ligeramente.

"No, en absoluto." Simon refunfuñió, cruzando los brazos sobre el pecho y apoyando la cabeza contra el respaldo de la cama del hospital. Sus ojos se cerraron lentamente.

"Idiota." Respondí en broma.

"Sabelotodo." Él me devolvió el apodo antes de que a ambos nos desvanecieramos lentamente en un sueñoo reparador.
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La luz de la pálida habitación del hospital me despertó de mi profundo sueño. Todavia me dolia terriblemente el cuerpo. Me sentía mucho mejor pero aún asi me causó un agotamiento intenso. Acurruque mi cuerpo hasta quedar sentada mientras analizaba la habitación. Mis ojos instantáneamente se dirigen al lugar vacio donde se suopne edtaria Simon.
Una ola de tristeza golpeó mi pecho antes de que un golpe en la puerta rompiera mi linea de pensamiento. Mis ojos se elevaron hacia la gran
puerta de madera para ver a Soap entrando. Una silla de ruedas a toda velocidad.

"¡Pequeña!" Soap sonrió alegremente mientras se detenia al lado de mi cama. Sus codos se apoyaron en el borde de la cama inclinándose
hacia mi. "Buenos dias, pared de ladrillos gruñón se fue a duchar. Price lo echó para que se refrescara. Volverá más tarde".

"Pudo haberme despertado". Resoplé levemente.

"Estarás bien", Me aseguró Soap, su rostro maltratado mirándome.

"Lo sé, está bien, espera, ¿Por qué te dejaron salir de tu habitación? ¿No deberías estar en la cama?".
Protesté sintiendo que mi cerebro comenzó a procesar la situación actual. Soap estaba en silla de ruedas en mi habitación. Su pulmón. Este hijo de puta "¡Soap!". Grité.

"iQué?!" Rápidamente respondió recostándose en la silla de ruedas y comenzando a hacer un berrinche como un niño pequeño. "¡Me aburrí!
Odio estar en cama. No hago nada".