El Planeta Único #1

9 - Él

Hablaban, reían y volvían a hablar, así estuvieron durante todo el camino; por mi parte, yo solo escuchaba y me reía de vez en cuando. Íbamos de camino a Acisif del Oeste, un pueblo un poco alejado de los Valles Soñadores, en donde vivía Aurora y donde estaba su padre esperándola.

El camino era largo y yo me estaba cansando, así que aproveché la buena disposición de Better quien me terminó llevando el resto del camino.

Pasamos por unas colinas, valles y también cerca de un bosque. Ryder nos explicó que esos árboles eran provenientes de Sitne y que el color de sus hojas dependían de las estaciones (colores cálidos en las estaciones cálidas y colores fríos en las estaciones frías).

Entonces comencé a notar algo interesante: Nada en Aceria era totalmente originario de allí, a pesar de ser el planeta más poderoso de todos. Aún así, me parecía genial todo lo nuevo que había en los lugares que veía. Pero después entendí que el planeta estaba hecho para que cualquier tipo de persona o criatura lograra vivir normalmente, y eso era algo positivo porque me enteré que muchos, de los cuales sus planetas habían sido destruidos, terminaban alojándose en Aceria, principalmente.

Ellos siguieron hablando durante el camino mientras que yo veía a mi alrededor y, de vez en cuando, escuchaba lo que decían. Fue cuando llegamos a un pueblo que se veía más grande que el pueblo donde vivía Ryder y los demás. Solo que, la casa de Aurora, estaba al otro lado, tuvimos que pasar por todo el lugar hasta que vimos una pequeña casa blanca con techos marrones y nos dijo que era su hogar.

Esa casa no era lo más llamativo del lugar porque, junto a esa casa, había otra casa, pero esta estaba terrible, con la madera rota y se veía totalmente abandonada. Al parecer, yo no era la única que miraba hacia esa casa ya que Aurora dijo...

- Los pequeños la llaman "La casa del miedo". Para mí, es algo exagerado.

- Si comienzas a pensarlo, sí da miedo - Mencionó Milo.

- He vivido aquí mis últimos años de vida, puedo asegurarles que esa casa es solo una casa deshabitada.

Con cuidado, me bajé de Better, entonces él me miró un momento. Miré hacia un lado de La casa del miedo porque estaba segura de que, algo o alguien, había creado una sombra que pasó rápidamente. Ellos estaban muy entretenidos con Aurora, así que me escabullí por un lado de la casa (sí, yo otra vez siendo demasiado curiosa). Fue cuando lo vi.

Un joven de piel clara, cabello marrón y que, a esa distancia, podía ver sus ojos brillantes, estaba sentado en una roca leyendo un libro. Tenía lo que parecía un marcador, así que pensé que estaba subrayando las palabras o marcando cosas importantes.

Sentí que, en alguna parte, lo había visto y, de repente, lo supe ¡Él! ¡Era él! ¡El que sacó a Milo del río cuando estábamos en La Tierra! ¡El que me dio el "Protector"! ¡El que nos mandó a Sitne! No tenía dudas, estaba segura que él era el mismo joven que nos ayudó y nos salvó.

Sin pensarlo mucho, me acerqué más a él hasta que estuve frente a él. Levantó la vista, yo le sonreí, pero él me miró con confusión. Al parecer, no se acordaba de mí, sinceramente, no me importaba.

- ¡Sí eres tú! - Dije con emoción.

- ¿Y tú quién eres? - Me preguntó en voz baja y con rostro serio.

- Nos conocimos el 11 de Julio junto al río, después que rescataste a mi hermano. Luego, antes de transportarnos al "Planeta Único", me diste esto ¿recuerdas? - Le mostré el "Protector", él lo miró por unos segundos y después me miró sorprendido.

- ¿Eres la niña terrícola que no tenía zapatos? - Me reí y asentí - Sigues viva... ¿Cómo llegaste a Aceria?

- Con quienes nos estamos quedando vinieron a ver a unos amigos aquí.