Empty Byakugan [Itachi Uchiha]

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Todas las parejas tienen peleas.

Es algo completamente normal e incluso hay personas que dicen que son sanas y ayudan al desarrollo de la relación. Claro, mientras se puedan abordar de manera respetuosa y usarlas como aprendizaje.

Usualmente las parejas tienen discusiones por diferentes puntos de vista, por diferentes costumbres o gustos.

Pero Itachi no era el tipo de persona que suele enfrascarse en discusiones, muchas veces le parecían una pérdida de tiempo y no era tan terco como para no saber reconocer sus errores, por suerte, Sora tampoco solía ser el tipo de mujer que busca discutir por cualquier cosa, ella decía sus preocupaciones o molestias en tiempo y él atendía sus peticiones sin problema así que nunca habían tenido una discusión grande.

Claro, el trabajo estaba aparte, cuando se trataba de misiones ambos tomaban un carácter un poco diferente, pero siendo ambos personas lógicas intentaban llegar a la mejor conclusión, no mezclaban las cosas y usualmente permitían que el otro tomara el mando cuando correspondía.

Así que Itachi nunca sintió que una gran discusión entre ellos se aproximara.

No hasta esa mañana.

Sora usualmente tenía una expresión bastante pacífica y era el tipo de chica que tiene un rostro amable que te invita a acercarte, incluso cuando estaba seria no se veía realmente intimidante.

Pero cuando se enojaba…

De alguna manera sus facciones se afilaban y tomaba un aspecto algo intimidante, la manera en que entrecerraba los ojos y mantenía el contacto visual te hacía sentir presionado, no se apresuró a gritar, es más, ni siquiera dijo palabra alguna, el silencio y su mirada te retaban directamente a intentar explicarte.

Mirándola detalladamente podía encontrar cierta similitud a Mikoto, su madre no era el tipo de mujer que grita o llora cuando se enoja, su aura cambiaba bastante y te hacía saber que estabas en auténticos problemas.

Itachi por primera vez en años se sintió en genuinos problemas y la verdad es que ni siquiera sabía muy bien como explicarse.

Porque por más paciente y tranquila que fuera su futura esposa, no había manera que tomara con calma el hecho de que había una mujer completamente desnuda en la oficina Hokage.

Itachi no pudo hacer más que mirar a Sora fijamente, su cerebro no respondía para hacer otra cosa como intentar justificarse o llegar a dónde estaba ella, solo sentía como si le estuvieran frotando hielos por todo el cuerpo.

Tomando las riendas de la situación, Sora terminó de entrar a la oficina y cerró la puerta con firmeza, la mujer desnuda también se veía excesivamente nerviosa pero se quedó congelada ahí a media habitación sin decir nada.

Sora miró a Itachi de arriba a abajo, estaba de pie y todo su uniforme estaba exactamente en su lugar, no tenía ni un solo cabello desacomodado ni rastro de haber tenido contacto con la mujer.

Se cruzó de brazos y movió la mirada hacia la mujer en cuestión mientras avanzaba un par de pasos en su dirección.

Itachi sintió un poco más de pánico por lo que Sora pudiera hacer, la mujer en su oficina por suerte no era una civil, así que aunque Sora se enfureciera lo suficiente para atacarla, existía la posibilidad de que pudiera escapar.

Sora se detuvo a un paso de la mujer y sin inmutarse por su desnudez, la miró de arriba a abajo un par de veces, la chica se intentó cubrir con las manos sintiéndose intimidada por la presencia de la Hyuga.

-Vístete.-Ordenó con voz fría y calma, la chica se quedó quieta por unos segundos hasta que Sora señaló el vestido que estaba en sus pies y repitió la orden.