{\Mi Angel,Mi Salvación /}(Giovannán)

CAPÍTULO 7

Giovanni Pov's:
Me sentía estúpido, lo conocía de hoy y ya quería que me hiciera suyo para siempre, pero en qué estaba pensando, Giovanni eres la monda tio te mereces un premio al mejor play-boy de la semana, serás idiota, el no te quiere como pareja sentimental, solo porque te besó ¿te crees que este chico tan guapo te va a pedir ser su novio? Asumelo nunca lo vaa a tener para ti solo, el tendrá millones y billones de chicas a sus pies para estar con él y complacerle cada día y cada noche que pasen con él, ellas podrán darle su virginidad, pero yo no puedo darle nada, solo problemas con todo lo que me hacen y seguirán haciendo, será mejor que lo deje ir y olvidarme de él para siempre y solo tenerlo como amigo. Me levanté y me eche a correr hacía la puerta del baño, la cerré con llave y con el seguro, cogí una cuchilla de afeitar y me dispuse a cortarme, de mis ojos caían lágrimas y no dude en hacerme el primer corte, cuando me lo hice sentí la puerta retumbar, como si alguien tocara, y así era alguien tocó y ese era Onán.
-! Giovanni¡ !¿Qué estás haciendo?¡ Giovanni por favor escúchame, no te cortes, tu vida vale más que cualquier otra cosa, por favor abre la puerta, no me hagas usar la fuerza por favor - yo no conteste, me hice otro corte y con este solté un grito de dolor. Vi como la puerta de desplomó y vi entrar a Onán, con su ceño fruncido y se agachó ante mi para cogerme de la muñeca y verme los nuevos cortes hice, el me miró y yo lo miré con mis ojos cristalizados, el suelo estaba lleno de sangre y mi muñeca izquierda también. -¿Porqué lo hiciste? - me pregunto pero me límite a contestar
-Para que quiero vivir si no estarás nunca a mi lado, seguro que me cuidas y me besas por pena, tu no me amas ni la quinta parte de lo que yo te amo a ti, ¡¿TE ENTERAS?! ! TU NO ME A.... - no pude terminar la frase, sus labios se pegaron a los míos dejadome en blanco de lo que le iba a decir, me levantó y me cargó hasta mi habitación, enredé mis piernas en su cintura, me aventó hacia la cama y empezamos a desvestirnos hasta quedar cuerpo con cuerpo, su piel era cálida y fuerte, sus músculos se contraían con cada movimiento, sus besos bajaron hasta mi cuello dejandome una pequeña marca, cada beso, cada movimiento me hacía tocar el cielo y la gloria, nos quedamos viendonos en la misma posición en la que estábamos, el me sonreía y yo se la devolvía, cuando terminamos, salió de mi y se recostó a mi lado, abrazandome por la espalda y dandome las manos, una por debajo del brazo y la otra por debajo de mi cabeza cogiendola y entrelazandola con la mía, se sentía tan bien, nos quedamos dormidos y juntos dormimos, por fin alguien me hizo suyo y de la mejor manera posible, con amor y pasión, y me alegro de que haya sido él, Onán....