capítulo 65

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Por fin estaba liberada de esas esposas de metales que me habían dejado marcada la muñeca. Lo de anoche con Tom no tenía que haber pasado pero me gustó, me gustó sentirlo, me gusto estar cerca de él. Pero sabía que estaba mal porque le tendría que haber puesto punto final a esto, pero sigo cayendo en el.

Me encontraba leyendo la carta que me había dejado la persona que me manda cartas, pensé que no me mandaría más porque hace dos días no recibo nada, esta carta decia: "No te pude escribir porque no he tenido tiempo. Segunda pista: soy de Hufflepuff, soy un chico"

El hecho de que sea de Hufflepuff no me indicaba nada porque yo no conozco a nadie de esa casa excepto Cedric,pero no es el porque no es su letra, a salvo que la haya cambiado. Pero no creo igual le voy a preguntar si lo veo.

Me encontraba en clases de movimiento físico, básicamente es una clase de activida física, correr, saltar, juego con pelotas. McGonagall decidió incorporar esta materia por nuestra salud ya que muchos no juegan al Quidditch y todos tendríamos que tener actividad física.

Mi uniforme de esta materia era un short deportivo que llegaba hasta la mitad del muslo color verde y una musculosa blanca. El de los varones era mucho más cómoda ya que tenían un short hasta las rodillas suelto y una remera, los colores eran los mismos. Algunas chicas le gustan estos uniformes que dicen que las favorece y se ganan miradas de algunos pervertidos, pero a mi no, se me hace muy incómodo ya que la tela se metía entre mis pieles y tenia que estar acomodándola disimuladamente.

-¿Y tu novio ya te dejo?- mire hacia un lado viendo a Hardin siguiéndome el trote (si estábamos trotando).

-No es mi novio- aclaré

-El se cree que si- dijo pero no le di importancia -¿O te prostituis para tener ventaja?- yo puse los ojos en blanco.

-Deberías tener más cuidado por donde pisas porque te podrías caer-

-¿Que...?- no pudo seguir su oración ya que le puse el pie haciendo que se caiga de cara al pasto.

-Te dije- seguí corriendo, pero me caí de rodillas sintiendo el pasto mojado vi mi tobillo y tenia la mano de Hardin sosteniendome.

-Tu también debes tener más cuidado- se levantó del piso y me extendió la mano la cual yo accedí a ponerme de pie -Por cierto que buen culo se come Riddle- sonrió y pasó por mi lado dejándome sola viendo como los demás corrían esquivandome.

Camine hacia la mesa que había botellas de agua, tome una y observe como corrían los demás, di varios tragos al agua fría sientiendo como se refrescaba mi garganta.

-Pensé que te había quedado claro que te alejes de el- escuche a Tom atrás mio, me di vuelta aún tomando de mi agua.

-Pensé que te había quedado claro que no sos nadie para mandarme- deje la botella en la mesa que había aun lado.

-JA! ¿Yo no soy nadie?-lo note algo molesto se cruzo de brazos frunciendo el ceño se inclino mirándome fijamente. Le iba a responder pero escuchamos la voz de la profesora que grita:

-¡Pónganse de a dos para correr un carrera!- vi la pista de cemento rojo que llegaba de un extremo al otro.

-Vení conmigo- me tomó de la muñeca llevando me a la fila de parejas. Observe la pista y era muy larga, yo odio correr y Tom tiene piernas largas osea que me puede ganar pero no si pongo el pie gano más ventaja.

Cada vez que sonaba el silbato sonaba aturdiendo mi odio, salía una pareja para correr. Nosotros ya estábamos apunto de salir solo esperaba a que la profesora haga sonar el pitido.

-Tom- lo llame el me miró -Perdón-

-¿Que...- sonó el silbato y sali disparada corriendo, vi como Tom se quería adelantar entonces fue ahí donde le puse el pie, el se cayó pero no completo ya que apoyo sus manos, trate de concentrarme en correr. Pero caí sentada al tropezarme con el pie de Tom que lo había puesto en mi camino apropósito.

DOLOR- Tom Riddle- t/n Donde viven las historias. Descúbrelo ahora