one shots dom x Brian

Vuelve a casa

By:DreamShadows

'Conoces el lugar donde solías vivir,
solías asar hamburguesas y costillas,
solías tener una pequeña fiesta cada Halloween con montones de dulces,
pero ahora, sólo pasas por aquí de vez en cuando,
Mierda, creo que Yo solo lleno mi tiempo,
con cualquier cosa para alejar el pensamiento de ti de mi mente.

Brian hizo una pausa y respiró hondo, se quitó el sombrero y se pasó la mano por su cabello corto al estilo militar, haciendo una mueca mientras sus dedos rozaban un corte suturado detrás de su oreja. El corte había sido un regalo de despedida de la guerra, y desde el corte los moretones le bajaban por el cuello y debajo de la camisa hasta marcar la mitad de su pecho con moteados azules y morados.

Volviendo a ponerse la gorra en la cabeza, se agachó y se alisó el uniforme antes de reajustar la correa de su bolsa de lona con una mueca de dolor mientras tiraba de su hombro y sus costillas maltratadas, suspirando y siguió adelante.

Mientras caminaba por la entrada del aeropuerto de San Bernardino, quedó abrumado por la gran cantidad de familias que esperaban allí, caras sonrientes y carteles de colores brillantes que le daban la bienvenida a él y a su escuadrón cuando regresaban de Irak.

Brian exhaló un suspiro, se alejó de la conmoción y se dirigió hacia la salida. No vio a su familia allí, lo cual, si bien no fue exactamente una sorpresa después de todo el fiasco de Los Ángeles, aún así le dolió.

Después de que todo se vino abajo en 2001, perdió a su familia, a toda su familia. Sus padres no querían tener nada que ver con toda la controversia en torno a su despido de la policía. Tanner y el resto de la fuerza se habían distanciado de él. No queriendo que ninguna parte de la ira del departamento se transfiera a ellos mismos.

Intentó no pensar en Dom y el equipo. Sabía que probablemente todos estaban relajándose y reconstruyendo autos en alguna playa de Sudamérica, simplemente pasándola bien y sin siquiera pensar en él. Le dolía más pensar en perder a Dom y al equipo que perder a su propia familia.

El simple hecho era que Dom y el equipo lo habían tratado más como a una familia que cualquier otra persona en su vida, con la excepción de Roma. Lo habían tratado como si perteneciera, e incluso Vince se había sentido como un hermano. Brian quedó devastado cuando se dio cuenta de que había perdido la cercanía.

Sacudiéndose de esos pensamientos, Brian continuó su lento camino hacia la puerta. Cada paso sacudía sus costillas y sus hombros, sus botas aterrizaban pesadamente en el suelo. Respirando entrecortadamente por la nariz, con la mandíbula apretada, reprimiendo el dolor. Brian atravesó las puertas de cristal, ignorando las llamadas de su escuadrón y manteniendo los ojos en el pavimento iluminado por el sol.

No había estado en los Estados Unidos durante casi dieciocho meses, y el solo hecho de ver las aceras manchadas de chicle y refrescos le hizo respirar mejor que en todos esos dieciocho meses. Tensión que había estado anudando sus hombros durante los últimos dos años; al dejar ir a Dom, su despido del departamento, el entrenamiento básico y, finalmente, Irak; aliviado.

Al ver un par de taxis alineados en la acera a treinta metros de distancia, Brian se giró y se dirigió en su dirección, cada paso respirando nuevo fuego a través de sus heridas. Brian se quitó la bolsa del hombro y la bajó para colgarla a su lado con la esperanza de que el cambio aliviara el dolor en las costillas y el hombro.

A tres metros del primer taxi, Brian se detuvo en seco. Un Supra azul marino estaba estacionado detrás de los taxis y, aunque el color era diferente, Brian reconocería ese auto en cualquier parte. Al mirar más de cerca, pudo ver una cruz plateada colgada en el espejo retrovisor y una camisa de trabajo manchada de grasa sobre el tablero.