one shots dom x Brian

Tendencias animales

By: HGiraffe

Brian era, había decidido Dom, mitad animal.

En realidad, fue sólo que Brian actuó como un animal. La forma en que se movía, hablaba e incluso actuaba convenció a Dom de que el niño era sólo mitad humano.

Cuando Brian estiraba los músculos acalambrados o doloridos, lo hacía con la gracia de un gato, estirando sus largos y delgados brazos sin pensarlo. Su columna se curvó, sus extremidades se extendieron, sus ojos se cerraron y su mandíbula se abrió. Brian incluso hizo un maullido casi lindo. Eso en sí mismo era una prueba.

Y Dom vio otras cosas; como cuando Brian se duchaba o mojaba el cabello, el rubio sacudía la cabeza con la misma intensidad y energía feliz que un perro pastor empapado. No sólo eso, sino que la sonrisa casi culpable y tímida que le lanzaba a cualquiera cuando su melena peluda caía sobre su cara había hecho que Mia se derritiera más de una vez.

También estaba el hecho de que Dom podría jurar que el chico era increíblemente ligero de pies. La forma suave de caminar como la de una pantera fue sorprendente para Dom y los otros hombres de pies pesados. Brian fue una de las únicas personas capaces de asustar a Dom con éxito, ¡y maldita sea! ¿Brian abusó de esa pequeña habilidad suya a menudo?

Y la capacidad de tener un dominio similar al de un lobo, y aun así darse la vuelta y mostrar la obediencia del perro de exposición mejor entrenado, fue realmente espectacular.

Por supuesto, también hubo cosas más pequeñas. Los grandes ojos de búho de Brian, el mar azul en el que Mia y sorprendentemente Letty coincidieron fueron las primeras cosas que llamaron su atención. Además de los dedos largos, fuertes y como arañas de Brian, que contenían una enorme cantidad de talento para frotar la espalda, era otra cosa que Mia disfrutaba.

Sin embargo, lo que Dom había visto más era la fuerza de elefante de Brian. El chico rubio tenía complexión fuerte, eso era un hecho, pero Dome se sorprendió mucho al ver que Brian era incluso más fuerte de lo que parecía. Fue realmente asombroso el peso que el niño podía levantar. O, sonrió Dom, preparar un puñetazo como lo había descubierto Vince. Había estado magullado durante semanas después de intentar saltar sobre Brian por primera vez. Incluso ahora, Vince puede odiarlo, pero tenía un respeto a regañadientes por el muñeco de nieve, con su fuerza de león y su valentía para intentar saltar sobre un hombre que lo superaba tanto como Vince.

El castor trabajador y entusiasta que era Brian solo había existido durante unas pocas semanas, pero había dejado una impresión en todos. Incluso mientras pensaba en ese momento, Dom todavía estaba sorprendido de lo inhumano que podía ser el niño. A veces sus acciones eran tan animales que hacían que Dom parpadeara y observara lo que estaba sucediendo con asombro.

Dom resopló. El niño era como el maldito Tarzán, sólo que sin los monos y el bonito fondo de plantas tropicales. Sólo Los Ángeles sucio y mugriento. Y, por supuesto, nada de taparrabos. No, de ninguna manera. No importa cuán animal sea el niño, será mejor que use pantalones en el garaje de Dom .

Con ese pensamiento, Dom se levantó de su silla del patio y se dirigió a la sala de estar de la casa, donde encontró el tema de sus pensamientos. Brian estaba profundamente dormido en el sofá haciendo esos pequeños maullidos otra vez. Dom se detuvo en la puerta y observó al niño acurrucarse en una bola increíblemente pequeña, ocupando menos de un tercio del ciertamente pequeño sofá. Sacudiendo la cabeza con asombro, Dom salió de la habitación.

"Brian, eres el único niño desordenado", pensó Dom en voz alta, "pero me alegro de que estés aquí".