Un Verano Para Nosotros

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Belly

Jackson y yo salimos de mi casa antes de lo que pensaba.

—Perdón.— le digo con mueca pena.— Mis padres pueden ser muy pesados.

—No pasa nada.

Él me abraza y yo me aferro a él.

—Que sepas que Jake no es mejor que tú, eres mucho mejor tú.

Asiente con la cabeza.

—No quiero parecer un creído, pero ya lo sé.

Me río super embobada por lo que ha dicho.

—Vale, no ha sonado nada creído...— digo con ironía.

Él me sonríe y obviamente, me contagia su sonrisa.

—Bueno, vamos a hacer tiempo, ¿quieres ir a la playa?— le pregunto.

Él asiente con la cabeza.

—Venga, vamos, que tengo aquí mi moto.

Él se sube primero, y yo me subo después.

—Por favor, no vayas muy rápido, no quiero que se me suba la falda.

—No te preocupes, que no se te va a subir.

Arranca la moto y yo me aferro a él porque aunque me esté acostumbrando a lo de ir en moto, me sigue dando un poco de miedo.

Él se ríe.

—No te rías tanto, y vamos...

Llegamos a la playa y no hay casi nadie, a estas horas, estarán comiendo. Aparte, en esta playa no suele haber gente.

—Bueno, ¿te apetece un baño?

—No tengo bañador.

Se encoge de hombros.

—¡Quien llegue el último al agua, se mete desnudo!— y empieza a correr hacia el mar.

Yo salgo corriendo detrás suyo.

Empieza a quitarse la ropa, hasta quedarse en calzoncillos, y yo también, hasta quedarme en ropa interior, y nos metemos en el agua.

Él me rodea la cintura con sus manos y yo sonrío.

Porque no puedo parar de reirme y sonreir.

—¿Te lo estás pasando bien?— me pregunta Jackson.

Asiento con la cabeza.

—¿Pero sabes cómo me lo pasaría mejor?— alza una ceja.— Así.— Y lo beso.

Joder, necesitaba besarlo ya.

Me pego más a él, aunque no creía que pudiera acercarme todavía más.

Es que con su solo tacto ya me hace sentir demasiado.

Joder, como le quiero...

Sigo besándole, demostrándole con un solo beso lo que siento por él, aunque sé que él no sienta lo mismo.

Me da igual.

Porque lo único que espero es que esto sea eterno.

<3

Estoy tirada en la arena, Jackson todavía está en el mar.

La verdad es que está siendo muy buen día y me lo estoy pasando muy bien. Salvo por la incómoda comida con mis padres.

Hemos pedido una pizza, y sorprendentemente, nos la han traído.