AAPVOMSVPHPS

117 5 16
                                    

Era un hermoso día en Villa Calma. Los pidgeys piaban al son de las lágrimas del gigante anaranjado, bañando las flores como ofrenda a sus aromas.

Aqua, el siempre tímido flareon, trotaba feliz por su habitación, ignorante del terrible destino que le aguardaba...

-¡Ignoro el terrible destino que me aguarda! - musitaba alegremente.

Sin previo aviso, resonó un puf en su armario, que se abrió de golpe, revelando a Ester, la semidiosa Kadabra.

-¡Hola! ¿Cómo estás, Aqua? Jaja, no contestes, ¡sé que tienes traumas de por vida! jejejeje!

Sin tiempo para reaccionar, Aqua fue empujado hacia un portal que Ester abrió, y se vio envuelto en una vorágine de luces y colores cuando el portal le absorbió por completo.

De repente, cuando el torbellino de sensaciones disminuyó, Aqua se encontró en un lugar totalmente nuevo y desconocido. Atrás había quedado la tranquila aldea y el relajante gorjeo de los Pidgeys. En su lugar, se encontraba en un vasto reino de otro mundo, rodeado de paisajes imponentes y surrealistas.

En realidad no, seguía en su habitación. Jaja

Aqua parpadeó, desconcertado, y observó su habitación, que no había cambiado en absoluto. Se palpó para confirmar que seguía físicamente intacto, y cuando lo confirmo, suspiro aliviado.

—Qué acaba de pasar?

La habitación permanecía en silencio, salvo por el suave gorjeo de los Pidgeys que había fuera de su ventana, como si se burlaran de lo absurdo de su reciente experiencia.

Aqua no pudo evitar sacudir la cabeza, incrédulo, y lo atribuyó a un extraño momento de ensoñación.

Se rió para sus adentros, luego suspiró casi a regañadientes y abrió la puerta de su habitación, buscando la cocina y su increíble sabrosura.

Caminó por el pasillo, balanceando su esponjosa cola a cada paso. Pero entonces, un dolor se instaló en su cabeza, cayó al suelo, con la consternación y la confusión parpadeando en su mente y sus ojos.

Se agarró la cabeza, con una mueca de dolor agudo que parecía atravesarle el cráneo. Miró hacia delante y se encontró con un muro de pelaje amarillo y brillante.

Chocó contra Volt.

-Lo siento mucho, Volt. No vi por dónde iba...

Volt se dio la vuelta y sus ojos ámbar se abrieron de par en par, sorprendidos, al ver a Aqua en el suelo, agarrándose la cabeza. Parpadeó un par de veces, y su confusión se reflejó en la disculpa balbuceante de Aqua.

-Oh, ok... - dijo, sin saber tampoco muy bien qué había pasado.

Extendió una pata para ayudarlo a levantarse, la cual Aqua acepto sin dudarlo

-Lo siento mucho... - empezó a disculparse Aqua, pero su voz se entrecortó al darse cuenta de algo.

Miró a Volt, con los ojos muy abiertos por el asombro, examinando todo y nada, del Volt que tenía enfrente.

-V-Volt...? Por qué suenas como una... chica?

- ¿Eh? ¿Qué quieres decir, Aqua? -preguntó, con voz aún femenina.

Miró a Volt, con el ceño fruncido por la perplejidad.

- No, quiero decir, eres un Jolteon, y ahora suenas como... una Jolteon hembra. - balbuceó Aqua.

-Sí... ¿Porque soy un Jolteon hembra, tal vez? - Preguntó casi con sarcasmo.

—Pero Volt, tú siempre fuiste un Jolteon macho! Quiero decir, tu voz, tu aspecto... todo!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 05, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Jolteon's Found FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora