Capitulo 4: Susurros, Romance, y Madrazos

117 8 16
                                    

El silencio no era espeluznante, en absoluto, de hecho, era reconfortante. Tan silencioso que incluso se podía escuchar el susurro de las páginas que se movían. El susurro de una historia, como a ella le gustaba llamarlo. Los miles de estanterías le daban un aire ancestral a la librería, y aunque las sillas y las mesas no eran precisamente agradables, cumplían su función.

Pero claro, Lucy no estaba aquí por los muebles ni por los millones de estanterías que tenía delante, no, estar sentada, sujetando un libro, y disfrutar de su susurro, era todo lo que ella necesitaba.

Lucy deseaba poder vivir así, nada ni nadie alrededor... sólo los susurros de los libros... lejos de todos.

Era un deseo infantil, lo sabía... así que tomar el asunto por sus propias manos era una especie de acto inconsciente para ella. Tal vez la razón por la que ahora se encontraba en la biblioteca. Sólo un momento, solo un instante de estos susurros, era suficiente para ella...

Por supuesto, esto era una rotunda mentira, prueba de ello... una voz lejana que la llamaba por su nombre.

—LUCY? . . . ESTAS AQUI?

Lucy no se inmuto. Dejo de pasar por las páginas, dejando de oír sus susurros, y se quedó tan callada como la propia biblioteca.

No había ni un solo Pokémon en la biblioteca, ni siquiera el bibliotecario. Así que se burló de la idea de que un cierto alguien se uniera a sus susurros, o más bien, despreciaba.

—Lo sabía! —exclamo Adrián desde las puertas de afuera, dejando entrar la luz del sol y arruinando la comodidad de Lucy en más de un sentido— porque no respondías?

—No quería que entraras. —respondió Lucy de forma monótona

—Odio tu honestidad... y bien? Me explicas QUE HACES AQUÍ?!

—Me aburrí.

—Oh claro! Y por eso dejaste a ese lucario congelado EN MEDIO DE LA PLAZA!

Lucy no cambio de expresión. Cerró el libro lentamente y lo dejó en la mesa, dejando ver el título "una llama susurrante" y se giró hacia Adrián.

—No no... continua, no quiero interrumpir tu entretenimiento —dijo Adrián con un claro sarcasmo en la voz, mientras se sentaba en la alfombra

—No puedo. No contigo aquí.

Adrián suspiro entre dientes apretados.

—Porque lo congelaste?

—Me confun--

—FUE INTENCIONAL! NADIE CONFUNDE "CONGELAR" CON "OPORTUNIDAD"! Que tan estúpido crees que soy?

—De verdad quieres una respuesta honesta?

—Por. qué. lo. hiciste? —Adrián ignoro la pregunta

—No diré.

—... Es como un backstory triste? ¿Te abuso sexualmente o algo así? —Dijo Adrián con una cara preocupada

—No.

—aww... —exhalo Adrián algo decepcionado

Adrián se arrugó ante el incómodo silencio que se había acomodado.

—podrías deprimirte en otro lado?

—no me has dicho el porque

—y no pienso hacerlo.

Adrián resoplo

—entonces yo tampoco pienso irme —dijo mientras se acercaba hacia ella, sentándose en la silla de al lado— si no se la causa, entonces no sabré si eres un peligro

Jolteon's Found FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora