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‹ ¿ Por qué mi instinto nunca falla? › Se preguntó lamentándose por su situación.
A lo lejos, podía observar como Takemichi se encontraba retando a un integrante de una pandilla que el chico no recordaba el nombre, frunció su ceño, algo habitual en el y caminó de manera lenta, mirando de reojo a dos rubios observar desde la entrada del lugar.
Chasqueó su lengua al ver cómo su amigo era golpeado por ese tipo, por lo que sin remedio alguno fue hacia la pelea.
‹ Nuevamente metido en estas mierdas. › Pensó con disgusto, pateando el abdomen del...¿Kiyoasa? ‹ ¿Quién mierda se llama Kiyoasa? › Burlón miró desde arriba, observando cómo el chico se agarraba su abdomen de manera dolorosa y soltaba quejidos.
━━ Tú...¡Maldito hijo de perra! ━━ Gritó con enojo el pandillero, levantándose con algo de dificultad. ━━ Te romperé toda la cara y pedirás pie-.
El azabache ni siquiera logró terminar su frase, cuando ya se encontraba nuevamente en el suelo e inconsciente, bastó solo una palmada no tan fuerte en su nuca, para hacerlo caer inconsciente.
Takemichi tembló, sabía que Keitaro pudo matarlo si quería, pero no lo hizo por él.
━━ ¿Por qué siempre los encuentro así? ━━ Preguntó de manera cansada el burdeo.
Para sorpresa del rubio, su cuerpo fue tomado con suavidad y delicadeza, lo supo en ese mismo instante, Keitaro temió por la vida del oji-azul y no lo admitirá directamente, pero si indirectamente.
━━ ¡Muy buenos días comandante!
Los dos amigos desviaron su atención, siendo Miyamura quién volteó su cuerpo hacía atrás, entre cerró sus ojos al ver a esos dos rubios nuevamente.
‹ Oh, sigue despierto. › Pensó, observando cómo el chico que anteriormente se encontraba "inconsciente" en el suelo ahora mismo se encontraba dándole una reverencia al rubio más enano que sus ojos rojos pudieron haber visto.
No escuchó lo que hablaban, pero si notó la molestia en los dos rubios, observando cómo nuevamente el azabache caía al suelo luego de una patada.
━━ Que copión... ━━ Murmuró molesto Miyamura.
Retrocedió dos pasos al notar como ahora los rubios se acercaban a ellos. La altura del de trenzas con el tatuaje en la cabeza no lo iba a intimidar, claro que no. Si el quería, podía destrozarlo.
━━ Ustedes dos...¿Cómo se llaman?
Los dos amigos se quedaron callados, Takemichi por miedo y Keitaro por no querer responderle, ¿Por qué debía de responderle a un enano que no conocía?
━━ ¡Respondan! ━━ El de ojos rojos quería reírse por el rostro de su amigo, juraba que si podía, este ya estaría meandose encima.
No pensó en nada ante eso, se quedó quieto y sus pensamientos se detuvieron, ‹ Más le vale que no se mee encima de mí. › Pensó asqueado con tan solo imaginarse aquél escenario.
━━ Hanagaki Takemichi. ━━ Escuchó por parte de su amigo llorón. ━━ Takemicchi. ━━ Escucharon los tres rubios más altos.
Miyamura frunció su ceño, ¿Takemicchi? ¿En serio le dió un apodo de mierda a su amigo?
━━ ¿Y tú? ━━ Estaba más que obvio que el de ojos rojizos no quería responder, pero también estaba más que claro que el líder de la Toman no se rendiría.
Un suspiro rendido salió de entre sus labios, mirando con desdén al rubio enano.
━━ Miyamura Keitaro. ━━ Respondió con sequedad.
El de ojos negros sonrió con alegría, sintiendo como su interior daba cosquillas y como su corazón latía con fuerza y rapidez.
━━ ¡Ahora son mis perras Keicchi, Takemicchi! ━━ El rostro de los dos chicos mencionados se deformaron, Keitaro sentía furia en su interior, realmente quería golpear al enano.
━━ ¿¡Como me llamaste bastardo!?
Takemichi soltó una pequeña risa nerviosa por la reacción de su amigo hacia el temible Mikey, realmente era feliz de verlo nuevamente.
