Cruzando para vivir en las llanuras salvajes (穿越 之 宅 在 荒野 平原 过日子)

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Aze miró el entorno circundante por el rabillo del ojo. No había muchas montañas rocosas en las llanuras. Los únicos que había tenían hombres bestia sentados a sus pies. Después de todo, era una defensa natural que podía ayudar a las bestias a bloquear la mayoría de los ataques de las bestias.

En este momento, donde estaban ubicados los dos era solo una llanura abierta y la única acacia relativamente alta estaba a varios cientos de metros de ellos. Los dracos hiena no podían trepar a los árboles. Si pudieran trepar al árbol, podrían evitar temporalmente los ataques de los dracos hiena. Sin embargo, los dracos hiena estarían bien incluso después de pasar sin comer durante diez días a medio mes, lo cual era imposible para las personas bestia. En el caso de que quedaran atrapados en un árbol rodeados de hienas dracos, tendrían una experiencia muy desafortunada y, en el peor de los casos, morirían atrapados en el árbol.

Los árboles de Dora Plains eran diferentes a los del bosque. Aunque los árboles aquí crecieron hasta ser muy altos, son muy escasos. Era muy común que hubiera un solo árbol en un radio de cientos o miles de metros. Era simplemente imposible escapar escondiéndose entre los árboles como en el bosque.

Como no podían luchar y no podían esconderse, la única forma que les quedaba era hacer todo lo posible para salir corriendo del alcance de ataque de los dracos hiena.

Aunque muchos pensamientos pasaron por la mente de Aze, de hecho, fueron todos en un instante. Le dio a Azhang una mirada significativa y Azhang entendió. No podían guiar a los dragones hiena en dirección a la tribu León-Lobo, ni podían llevar a los dragones hiena a su propia casa. Actuar por separado por el momento podría mejorar enormemente sus posibilidades de supervivencia.

"Tío Azhang, si escapamos de los dracos hiena, nos encontraremos nuevamente en el río Chishui". Aze dijo en voz baja.

Azhang asintió. "Cuídate, no te preocupes por mí. Si no logro regresar..." Azhang hizo una pausa y luego sacudió la cabeza. "Olvídalo. Primero solucionemos la situación actual".

La situación actual simplemente no permitía que los dos hombres discutieran en detalle. Los dragones hiena que salieron de detrás de los montículos de nieve habían comenzado a extenderse lentamente hacia ambos lados, con la intención de llevarlos silenciosamente a los dos al cerco.

Un macho hiena-draco, que parecía ser el líder, estaba al frente. Su enorme boca estaba ligeramente abierta, con saliva deslizándose por los espacios entre sus dientes y sus ojos estaban llenos de un aura determinada. Su estómago estaba arrugado, parecía como si no hubiera comido nada desde que comenzó el invierno.

El macho del dragón hiena emitió un gruñido grave y amenazador con su garganta. Para una presa que no podía escapar de sus garras, no tenía prisa por actuar. Años de experiencia le habían enseñado que la impaciencia a menudo permitía a estas astutas presas encontrar una oportunidad de escapar.

Pero Aze y Azhang realmente no dejaron que los dracos hiena los rodearan antes de comenzar a actuar. Casi inmediatamente después de intercambiar miradas, se lanzaron en direcciones opuestas, uno a la izquierda y otro a la derecha. Con unos pocos saltos, ya se habían alejado varios cientos de metros.

Los dracos hiena también reaccionaron muy rápidamente. Un dragón hiena corrió directamente hacia la acacia cercana. No querían tener que esperar unos días inútilmente hasta que la presa muriera de hambre antes de poder comer algunos bocados.

Los dracos hiena, al igual que los guepardos de las llanuras, eran notoriamente quisquillosos con la comida. Sólo comían carne fresca. Por supuesto, si la presa fuera reemplazada por un hombre bestia, no les importaría comer carroña. Después de todo, los hombres bestia eran demasiado difíciles de atrapar. Ninguno de ellos querría perderse esta deliciosa comida por un problema de frescura. Las llanuras no eran como el bosque y no tenían demasiadas opciones.