Una Flor Perdida En El Makai (Dr. Stone x Yu Yu Hakusho)

Capitulo 04: Misión: ¡Rescatar a Gen!

"Senku, ¿Puedes oírnos?"

Senku no podía responder al mensaje de sus amigos, estaba más preocupado en encontrar una forma de evitar quedar estampado contra el asfalto y comenzó a sacar sus cosas de la mochila hasta que encontró el paracaídas y buscó un buen ángulo donde abrirlo.

Al final logró no morir mientras aterrizaba pero se sintió algo adolorido de todas maneras.
¿Como pudo su portal lanzarlo desde el cielo?
Debería ver como mejorar eso.

"Todo en orden, comenzaré a buscar a Gen."

Les respondió tocando un botón del muñeco mientras dejaba el paracaídas atrás y se preparaba para explorar en que lugar había caído.

Al llegar a una ciudad cercana se encontró con una vista nostálgica de su mundo antes de la petrificacion.

Pero mucho antes, alrededor de los años 90', el tiempo de las plantas genéticamente modificadas y el primer telescopio espacial.
Una época en la que el ni siquiera existía.

Las tiendas y las personas se veían como una de esas películas que a Byakuya tanto le gustaban pero la atención de todos al parecer estaba en el. Comenzaban a susurrar mientras lo miraban y se alejaban a donde el pasara.

Le tomó unos momentos darse cuenta que tal vez el problema era su ropa y su cabello, que para las personas de esta época podría considerarse algo extraño. De ser así, era poco probable que quisieran ayudarlo con información para encontrar a Gen, por lo que decidió entrar en una tienda de ropa para cambiar su apariencia.

Estaba eligiendo algunas prendas cuando la gente alrededor de el se vió asustada y algo golpeó contra su cabeza sin que pudiera reaccionar para saber que era.

"Gen, no te asustes, te encontraré pronto".

Fue su último pensamiento antes de caer desmayado.

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– ¿¡Como es posible que sean tan malos!?

Era la tercera vez en el día que se escuchaba al bicolor gritarle a los demonios. Había intentado enseñarles a ser más amigables con los humanos para cuando tuvieran que llevarlos a través del portal sin el, creyó que eso demostraría su empeñó por su trabajo y haría que Hiei lo liberara más rápido, pero parecía casi imposible conseguir que los yokais no espantaran a los humanos con cada uno de sus intentos.

– No es nuestra culpa, ellos creen que nos los comeremos – intentó excusarse uno de los demonios, por alguna razón ese simple humano lograba que todos siguieran sus ordenes sin quejarse.

– Trabajaremos en eso, por ahora practiquen su sonrisa amable y su saludo hacia los humanos. De la forma menos aterradora posible – les dijo el bicolor al ver que ya era su hora de tomar el té con Mukuro.

En los últimos días se había encargado solo de devolver a los humanos, ya que Hiei tenía otras tareas, aún así se sentía a gusto con la idea de que confiara más en el como para hacer todo por si mismo.

– Veo que tus poderes se han incrementado – le sonrió Mukuro mientras hablaban en la merienda.

– Se deberá a que logré dominarlos casi por completo – decía el joven mago con orgullo – lo cierto es que cuando era niño solía soñar con un poder como este. Y ahora que lo tengo es algo emocionante.

La mujer frente a el se reía de sus anécdotas pero de repente puso un rostro serio.

– Gen, sabes lo que eso significa ¿No es así? – el menor párpadeo confundido como respuesta – quiere decir que ahora, más demonios estarán conscientes de tu poder y eso te pondrá en mayores peligros.