10. Acercamiento

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-Profesor encontré una forma de regresar a Erik a su mundo y aunque llevará tiempo es posible conseguirlo.

-Eso es maravilloso Hank, ¿ves Erik? Te dije que Hank lo lograría.

-Sí, tenías razón, gracias Hank y espero poder ayudar si es posible.

-Bueno necesitaré un mutante con habilidad para cambiar de mundos o algo similar.

-Entonces necesitas que mire si hay alguno con dicha habilidad, entiendo iré en un momento creo que debemos almorzar primero ¿qué dices Erik?

-Me parece bien además no quiero agotarte.

-Hank ¿nos acompañas?

-Por supuesto Profesor, oh Jean también podría ayudarnos.

-Ella dice que sí y viene para acompañarnos junto con los demás.

Más tarde en el laboratorio

Charles se encuentra conectado a cerebro buscando quien pueda servir para el proyecto de Hank, logra mirar en muchos mutantes sin embargo no encuentra ninguno.

-Debería tomar un descanso Profesor.

-Tranquila Jean estoy bien no es mi primera vez.

-Puedo seguir buscando por usted.

-Creo que sería una buena idea Charles, llevas cuatro horas buscando.

-Esto de acuerdo con lo que dicen Profesor, no tenemos que encontrarlo hoy. Podemos seguir mañana y Jean también puede ayudar por eso se le pidió venir.

-De acuerdo, está bien ya le doy el control a Jean. Sé que están preocupados son muy ruidosos.

-¿Te parece si me acompañas por algo de comer y tal vez una partida de ajedrez?

-Erik solo tratas de engatusarme para que me aleje del laboratorio.

-¿Está funcionando?

-No tienes que cuidarme como a tu esposo sabes que no soy él.

-Una versión de él en este mundo que no permitiré deje de lado su salud y bienestar en mi presencia, además esa mirada solo hace que luzcas más como mi esposo, supongo que así se verá en unos años, igual de hermoso.

Charles no puede evitar sentirse abrumado y avergonzado por este Erik que esta innegablemente fascinado y loco de amor por su marido. Incluso Jean no puede evitar sonrojarse y las noches son francamente difíciles ya que tiene que bloquear la mente de su invitado debido a lo vivido de sus sueños.

-Profesor debería aceptar ir a descansar en compañía del señor Erik, estaremos bien sin usted.

-Entiendo Jean y lo siento por ello.

Jean realiza un gesto con las manos para indicar que no hay problema y así ambos hombres se encaminan fuera del laboratorio.

-Sabes a veces parece que me estas coqueteando, ¿debo preocuparme?

-En lo absoluto, sé que no eres mi Charles no solo por la apariencia sino también por la personalidad así como ciertos gestos que te diferencian de él. Siento cariño por ti obviamente a causa de las similitudes pero no soy tan tonto como para creer que eres él ni pretendo extralimitarme. Me disculpo si mis acciones y palabras te incomodan o abruman.

-Me alegra saberlo y gracias, solo que verte siendo de esta forma y tus pensamientos me toman desprevenido sobretodo en la noche.

-Oh... me disculpo por eso no sabía que incluso por las noches...lo siento. Mi vida matrimonial es muy... placentera, nos amamos y nos gusta demostrarlo en cada oportunidad.

El silencio reina por un tiempo hasta que llegan a la cocina y se disponen a preparar un buen refrigerio para ambos, posteriormente se dirigen a la biblioteca donde juegan ajedrez hasta la hora de la cena.

-Bien es momento de cenar Raven vendrá por nosotros sino nos apresuramos.

-De acuerdo ¿Cómo te sientes?

-Bastante bien gracias, sabes en realidad ¿te gustaría seguir juagando después de cenar?

-Me encantaría Charles.

Ambos se sonríen antes de seguir hacia su destino.

Entre decisiones y realidades se revela el corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora