"ENTRE MEMORIAS Y OLVIDOS"

MI VERDADERO DESEO

—Becky, ¿sabes dónde está Clyder? —preguntó Damian con curiosidad.

Becky lo escuchó y le dio un pequeño golpe en la cabeza—De verdad lo haces sentir mal, pobrecito, trata de ayudarlos, disfrutar con ustedes y solo es rechazado. ¿Así tratas a tus amigos?

—Supongo que sí, es mi amigo, puedo tratarlo mal. Esa es la verdadera amistad, jeje.

Becky le lanzó una mirada molesta.

—De todas formas él sabe que bromeo y hace lo mismo.

—Tanto tiempo preocupado por Anya, acompañándome y sin más compañía. Deberías apreciarlo más. Ahora mismo viajo a Ostania, a la Academia Edén.

—¿Qué? ¿Y por qué? Aarg, ¿Justo en este momento?

—Claro, justo mañana es la imposición de las stellas de fin de curso y su hermanito estudia en Edén, así que quiso celebrar con él. Pensaba que te había invitado.

—Bueno, supongo que estaba con Anya en temas más importantes. Oye, una pregunta, tú conoces a una chica con pelo rubio y un adorno de una flor en su cabello, estudiaba con nosotros...

"Arg, no me acuerdo cómo lucía exactamente. Espérame unos minutos" —Damian se colocó el casco de MENTEX— "Recordaré al menos cómo era..."

—No sé de qué hablas —respondió Becky con un tono de voz ligeramente burlón—. De todas formas, no guardo tantos recuerdos de la academia. Los únicos recuerdos que tengo son con...

—Hola —interrumpió un chico de pelo castaño que llegó junto con Becky.

—¡Ken! Qué alegría verte de nuevo —exclamó Becky mientras lo abrazaba con entusiasmo y Ken correspondía al gesto con una sonrisa sincera.

—¿Vienes a visitar a Anya? —preguntó Becky curiosa.

—Sí, ¿Dicen que ya mejoró bastante? Quiero comprobarlo. Ey, hola Damian, ¿ya te sientes mejor tú también? —Ken miró a Damian con una mirada amigable.

—Ehhh, sí... sobre eso, no me voy a disculpar contigo. Solo estorbabas, estaba haciendo mi trabajo tranquilamente hasta que interrumpiste —respondió Damian, tratando de parecer indiferente.

—Ahh, ya veo —dijo Ken asintiendo con una sonrisa divertida—. Siempre es agradable causar un poco de caos, ¿verdad?

—Deberías dejar de seguirle el juego a Anya—comentó Damian.

—Pero ella se ríe de ti —respondió Ken encogiéndose de hombros.

—Agh, bueno. De todas formas, parece que a todos les gusta verme incómodo o molesto... ¿No puedo tener un solo día tranquilo? Por favor —suspiró Damian.

—¿Significa que aún te gusta? —Preguntó con una ceja alzada y una sonrisa traviesa.

Damian soltó un suspiro resignado— Algo asi... De todas formas, eso no importa. Solo visítala—Dijo incomodo.

—Damian, ya no seas tan celoso —intervino Becky con una expresión de complicidad—. Además, Ken ya tiene novia, ¿no es así?

—Bueno, de hecho... ocurrieron muchas cosas y...

—Sí, sí, como sea, no me cuenten su vida —bromeó Damian, intentando cambiar de tema.

—Tú nunca cambias, ni siquiera se de que tienes miedo —comentó Becky—. Te apuesto que ni siquiera le has dicho a Anya lo que sientes por ella, incluso después de que solucionaron todo.

Damian pareció incómodo por un momento— Ehhhhh...

—Anya puede hablar y estar con quien desee, y no puedes hacer nada. Sigues siendo inexperto en el amor —dijo Becky un poco molesta—Pronto llegará el verdadero príncipe azul para Anya y te la arrebatará, y espero verte sufrir por ser tan... ENGREÍDO, TORPE, CELOSO Y TONTO.