CAPÍTULO 02

362 36 3
                                    



Vive tu vida en modo avión

-anónimo-

La noche apareció muy rápido, me encontraba en mi habitación sentada al borde de la cama mientras hablaba por celular con Danny, mi mejor amigo, lo nombraba así cada vez que me hacía enfadar, pero usualmente lo llamaba simplemente Dan, el era una persona de otro planeta, siempre pronunciaba palabras rebuscadas o extrañas que no estaba al alcance de nuestro idioma, sus gustos eran peculiares, pero eso lo hacía único y entretenido. Algo que puedo acotar entre risas es que él era bajo, de hecho casi de mi estatura, yo medía 1.60 m y él solo me ganaba por unos 3 centímetros, fue una señal que la pubertad se olvidó de mi amigo.

Su cabello era negro un poco ondulado y alborotado, el color de sus ojos eran igual de oscuros como la noche.

Teníamos la misma edad, pero él parecía aún menor, no lo digo por su estatura, sino porque tenía rostro de bebé y su contextura era ligeramente delgada, como si hubiera tomado la fuente de la juventud.

Dan era extremadamente expresivo. Era el retrato de alguien que ha tomado dos energizantes, cuatro barras de chocolate y un litro de buen humor.

Yo era lo opuesto, callada, cautelosa, pocos sociable y con desgano de mantener una conversación, sin embargo él era la única persona que lograba sacar mi lado extrovertido y las infinitas carcajadas por sus ocurrencias e inesperados comentarios no podían faltar.

Entre nuestras conversaciones, Dan estaba muy impresionado de que yo no conociera al malhumorado de Haysel, el chico estrella e inteligente de todo el campus, fue lo que me informó, quien al parecer era muy notoria la admiración que sentía hacia el tipo. También mencionó que era alguien muy reservado, su presencia resultaba ser intimidante y evitaba cualquier plática con las personas, especialmente con las chicas que se acercaban la mayor parte del tiempo.

—Con ese genio quién querrá ser amigo de él — comenté irritada al recordar el mal momento de hoy.

—Las chicas — Respondió Dan al instante muy entusiasmado.

—Las chicas están ciegas y sordas— refuté con la misma molestia.

Lanzó una carcajada desde el otro lado del cel, yo sonreí al escucharlo. Tenía una risa muy contagiosa y burlona que era inevitable no reírse con él.

—Antes que se me olvide—interrumpí su risa—Lo raro de todo esto, es que Claris le entregó la invitación de la fiesta de aniversario que te comenté la semana pasada.

Lanzó un sonido de asombro exagerado.

—Espera, espera, quiere decir que Haysel es una persona influyente, pero ¿Cómo?.

—No lo sé, quizás es un accionista, o sus padres lo son. Ahora no me sorprendería porque ha ido con frecuencia al restaurante.—Pausé por un momento regresando un pensamiento que había ignorado —Haysel, lo he visto en algunas ocasiones.

En mi sueño o tal vez no.

—Yo siempre lo veía— dijo entusiasmado

—Dan, concéntrate por favor, hablo en serio— dije en regaño— recuerdas el sueño donde tu y yo salimos corriendo.

—¿No me digas que es Haysel el chico desconocido que estaba corriendo junto a ti?—Sonó irónico.

Negué con la cabeza, negándome para mi misma que era una tontería.

—Olvídalo.

—Ok, pero debes ir, para que tu papá lo haya invitado es porque él es alguien importante en tu mundo—comentó con un tono lleno de entusiasmo.

SUEÑO VACÍODonde viven las historias. Descúbrelo ahora