Cap 24: Bogotá

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El vuelo con destino a Bogotá ya había despegado, dentro de él iban Catalina Ángel y Beatriz Pinzón Solano, la cual la estaba matando una poderosísima vergüenza y claramente la resaca.

- Ay Betty, ya le pido algo para ese guayabo que tiene usted.

- Qué pena molestarla, doña Catalina, pero se lo agradecería mucho--Beatriz se sentía horrible, estaba tan arrepentida de haberle seguido el paso a Michael el día anterior.
Sin embargo, por pedido de Cata una azafata le llevó un Bonfiest diluido.
Y la economista pasadas media hora por fin pudo levantar cabeza, sólo quedaba un mínimo rastro de la resaca, pero al disminuir ese malestar, aumentaba el sentimiento de vergüenza.

- Ya mejor, Betty?- preguntó Cata al ver que la economista se incorporaba.

-Sí, doña Catalina, ya me siento mucho mejor, muchas gracias y qué pena nuevamente molestarla por esto- repuso apenada.

-No se preocupe, Betty. Más bien cuénteme algo, qué pasó ayer con Adri? Estoy intrigada - - le regaló una sonrisa cómplice.

La economista tragó en seco y se puso roja. A lo que Catica abrió los ojos suponiendo lo que había pasado... Iba a abrir la boca, cuando Betty la interrumpió toscamente- OH, no no,no, es lo que está pensando.. Dijo presurosa- O sea, ayer me pasé de la raya, doña Catalina, cuando tomo me vuelto alguien muy diferente, es más, con decirle que si no pasó nada fue gracias a ella.- manifestó con pena, apretando los labios. - Realmente no se qué me sucedió, doña Catalina, es verdad que Adriana me gusta, pero me da miedo lo que pueda pasar ahora en Bogotá.- Añadió

La organizadora dio un suspiro- Bueno, yo creo que no se debe preocupar por eso ahora,Betty, usted es joven, inteligente, bonita, tiene toda una vida por delante para explorar,para salir con quien usted sienta atracción, ahora es el momento.! - continuó - Adriana es una persona bellísima, puede darse la oportunidad de conocerla, obviamente siendo clara con los sentimientos de usted hacia ella, no pasa nada, dese el gusto de explorar.

La economista se quedó meditando, dándole vueltas a aquellas palabras que resonaban en su cabeza. Hasta que el avión aterrizó.

Los papás de Beatriz y Nicolás esperaban por Betty.

- Betty, Betty es usted?

- Ay mamita, por Dios está hermosa... - Qué me le hicieron Betica?
-Se hizo una cirugía o qué?

Todos la abrazaron, le dijeron lo bonita que estaba, etc, etc.

***
Al llegar a la casa subió con Nicolás a su cuarto a hablar sobre la situación en la que se encontraba la empresa.

-Ay Nicolás, ahora si cuenteme bien cómo están las cosas en la Ecomoda?

-Si le contara Betty, eso está hecho un desastre, mañana rece para que no se la coman viva.

Beatriz sólo suspiró, era verdad, mañana tendría un día larguísimo. Sin embargo había algo peor que le preocupaba aún más; mañana vería a Marcela Valencia.

El teléfono sonó.

-Aló.- contestó la economista
-Hola, Betty,- saludó una voz dulce
-Adriana? - preguntó Betty extrañada.
- Sí, Betty, soy yo. -
-Cómo consiguió mi número?
-Tengo mis métodos.

Ambas mujeres sonrieron

Mientras tanto Nicolás hacia muchas muecas tratando de saber quién era la que llamaba, qué Adriana. La única Adriana que conocía era a la modelo pero era obvio que esa no podía ser.

- Cómo estuvo el viaje.?

-Bastante bien, aunque tenía un poco de resaca-

Nico enseguida puso cara de incrédulo, Betty con resaca?

¿Betty y Marcela? (Marcetty) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora