Un Malentendido - Lawlu

Capítulo 6: Final

Se agacha para atarse los cordones de los zapatos, levantándose de nuevo; se ajusta la corbata para que quede perfectamente en el centro. Se mira por última vez en el espejo y sonríe, satisfecho con su aspecto.

El timbre de la puerta resuena en todo el apartamento, seguido de un triple golpe. El patrón continúa hasta que el propietario llega a la puerta y la abre con cara de enfado. Su invitado lo mira con una sonrisa familiar, una que sabía que no podría permanecer enojado por mucho tiempo. Su invitado salta sobre él, haciéndole perder ligeramente el equilibrio, pero lo recupera y rodea con sus brazos al joven que se aferra a su cintura.

"¡Traffy!", grita su invitado con alegría.

"Estaba a punto de llamar. ¿Por qué has tardado tanto, Luffy?". pregunta Law, dirigiéndose al sofá y dejando caer a los dos donde Luffy continúa a horcajadas sobre él.

"Ace necesitaba ayuda para encontrar su otro zapato. Buscamos por toda la casa e incluso mandó a Marco y a Thatch a comprar unos nuevos". Explica

"Podrías haberme llamado sin más; tu hermano y yo tenemos la misma talla. ¿Y qué pasó? ¿Acabasteis encontrándolo?"

Luffy comienza a reírse "oh, lo encontramos bien... el perro tonto de Shanks lo desenterró en el patio trasero, pero estaba completamente masticado."

"Eso realmente apesta"

"Sí, Ace parecía a punto de dispararle al perro; por suerte Marco llegó justo a tiempo con un par nuevo".

"Entonces, ¿todo va bien?", dice y cepilla un mechón de pelo negro detrás de la oreja de Luffy. "¿Va todo bien?"

Luffy salta de Law, consulta el reloj del salón, sonríe para sí y se dirige a la cocina.

Law puede oír el ruido de cajones abriéndose y cerrándose, platos golpeándose unos contra otros y posiblemente alguno cayendo al suelo. Oye a Luffy disculparse mientras tira a la basura lo que sea que haya roto... otra vez. Law se da cuenta de que esta vez es mejor ir a comprobar los daños.

Se queda de pie al borde de la entrada de la cocina, observando cómo Luffy se come un sándwich doble apilado que ha hecho en poco tiempo. Nada parecía demasiado destruido, tal vez un plato sucio o dos, pero aparte de eso, todo estaba bien. Gracias a Dios, porque Law no quería perder otro domingo limpiando toda la cocina. Y como Luffy pronto se mudaría a su casa, por fin después de diez meses de noviazgo, ahora sería él quien tendría que limpiar todo.

"¿A qué hora tienes que estar en la iglesia? ¿No necesitas tomar fotos antes de la ceremonia?"

"La ceremonia no empieza hasta las tres, y vamos a hacer fotos después de la iglesia, ¡así que aún tenemos tiempo de sobra hasta entonces!". explica Luffy alegremente. Deposita su plato vacío en el fregadero y se acerca de nuevo a Law, rodeándole la cintura con los brazos y mirándole con una sonrisa seductora: "Tenemos dos horas más antes de que empiece todo".

Law se inclina hacia delante y, de nuevo, se pasa un largo mechón de pelo por detrás de la oreja -la maldita cosa se estaba alargando-, junta sus labios, dejando que Luffy controle el movimiento, hasta que entonces se separa del beso.

Se quedan abrazados entre el centro de la cocina y el salón. Law mira a su novio más joven y piensa en las ganas que tenía de sacarlo de aquí y llevarlo al dormitorio; después de todo, tenían dos horas más. Y antes de siquiera considerarlo, sabía que no podía suceder de cualquier manera, tenía que estar en otro lugar en una hora.

"Está bien, sin embargo tengo que salir antes de que se me haga tarde" Le besa la nariz y empieza a caminar hacia su dormitorio con Luffy siguiéndole por detrás "así que tendrás que disfrutar de tus dos horas extra sin mí".