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Mi recuperación fue constante y a un ritmo rápido, ya que Chaewon era una excelente doctora

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Mi recuperación fue constante y a un ritmo rápido, ya que Chaewon era una excelente doctora. Gracias a aquellos medicamentos extraños y poco convencionales que me recetó y el hecho de que yo había seguido sus indicaciones al pie de la letra, me ayudaron mucho a la hora de acelerar mi recuperación.

Durante este tiempo, Minho mandó a Jisung varias veces para traerme la comida, y en parte, para hacerme compañía, así al menos no comía sola. A veces me sentía sola, era agradable poder comer con alguien aunque fuera en silencio. Pero con Jisung no era así.

Me dedicaba a escuchar las historias que el mensajero me tenía que contar: desde las tradiciones más raras que había en pueblos muy antiguos de la llanura de Noe hasta las comidas más exóticas e incluso extravagantes que había podido oír nunca.

Tampoco es como si me acordara de las que había oído.

Pero todo se acaba en algún momento, y al cabo de una semana de reposo, me llegó la noticia de que debía volver al hospital para hacerme la revisión. Tras hacerme los chequeos pertinentes con Chaewon y Jeongyeon, la chica que me atendió el día de mi estadía en el hospital, decidieron que tanto yo como mi estado físico era apto para continuar con mi día a día en el Palacio. Así acabó por finalizar mi semana de descanso.

Las buenas noticias era que Minho me había cambiado de guardia, y ahora solo tenía que asegurarme de pasar las dichosas pruebas físicas que daban la licencia para poder ejercer en cualquier rango de cualquier guardia existente.

Era evidente que exigirían algo así. Aunque no tuviera contacto directo con la milicia, iba a servir a la Reina y a la realeza de algún modo u otro, en caso de peligro debo de ser capaz de poder actuar de la forma correcta, y anteponer la vida de la Reina por encima de la mía. Debía de proteger a la Reina aunque eso me costara la vida.

O eso es lo que me había explicado Jisung en una de esas muchas horas en las que pasábamos comiendo juntos como si no tuviéramos nada que hacer. Aunque luego Jisung saliera la mayoría de las veces corriendo porque llegaba tarde a cubrir el próximo turno.

𝐍𝐎𝐄𝐀𝐒𝐘 | Lee MinhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora