Encinta [Schmico]

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Con el tiempo la familia Kim-Schmitt no tardo en adaptarse a la rutina de regreso al trabajo por completo, tanto así que Alex estaba cumpliendo casi los doce meses de edad, lo cual significaba que faltaba relativamente poco para que cumpliera su primer añito.

Lo cual emocionaba bastante a sus padres, no pasaría desapercibida una fecha tan importante.

Un nuevo día comenzó, y cierto castaño despertaba a un pequeño azabache.

"Buenos días al bebé más hermoso de todo el mundoooo" Cantó Schmitt acercándose a la cuna, en la cual Alex ya está despierto de pie sosteniéndose de los barandales de madera "Hola Alex, ¿has dormido bien?" Preguntó el de gafas esperando respuesta, pero como siempre no había sonido alguno que saliera de los labios del menor.

El castaño no dejo de sonreír y no dudo en cargar a su pequeño cuando le estiro sus brazos.

"Buenos días a los dos amores de mi vida" Dio los buenos días el coreano saliendo de la ducha con una toalla atada a su cintura y aún con su cabello goteando un poco. No dudó en admirar a los dos rizados, ambos con sus ojos un poco somnolientos y sus cabellos ondulados despeinados debido que se iban levantando, jodidamente adorable.

A Nico le tomo apenas un par de minutos para terminar de vestirse y esta vez ser el quien tomará en brazos a su hijo, ya que su tarea asignada era preparar a su pequeño al respecto de la ropa que usaría y la preparación de su mochila para la guardería mientras Levi tomaba su ducha correspondiente, se terminaba de alistar e incluso preparaba el desayuno.

Ese día habría huevos y tostadas francesas para comenzar el día.

Alex era un bebé con un muy peso, a decir verdad se alimentaba muy bien, incluso su molesto tío Parker le decía que era un bebé obeso, a lo cual Schmitt solo puede decirle que se vaya al demonio. Su bebé es hermoso tal como es.

Mientras Karev no le diga nada contrario acerca del peso de su pequeño no tiene porque preocuparse.

...

Habían pasado un par de minutos, cuarenta minutos para ser exactos y justamente Nico se encontraba aparcando el auto en el estacionamiento del Grey Sloan.

Levi se encargó de bajar las batas de ambos evitando que puedan arrugarse, sus mochilas junto con la pañalera de su hijo, más su propia mochila y el maletín de su esposo. Mientras que Nico desabrocha con cuidado a Alex del asiento para auto, para llevarlo en sus brazos hacia el interior del hospital.

"Buenos días" Saludo Levi luciendo bastante cómico para las personas de la recepción con tantas cosas siendo cargadas por el. Su torpeza hizo de las suyas y se tropezó con sus propios pies, cayendo al suelo de lleno. Si no fuera porque llevaba tantas cosas en sus manos hubiese estrellado su cara contra el piso del hospital. Las mochilas amortiguaron su caída, pero la vergüenza se notó en sus mejillas.

"¿Estás bien, amor?" Rápidamente Nico se acercó, sin poder hacer muchas maniobras debido a un pequeño bebé que mira atento lo que sucede en sus brazos.

Un par de enfermeras se acercaron para ayudarlos lo cual el matrimonio agradeció bastante. Incluso no dudaron en saludar al pequeño Alex, realmente es un bebé muy querido por todo el hospital y es que su belleza y carisma flechan el corazón de cualquiera que lo mire.

...

La guardería se encuentra ubicada en el primer piso del hospital, aún es temprano por lo cual hay pocos niños aún. Más bien se trata de los hijos de sus colegas. Jackson justamente iba de salida el cual no dudo en saludar a los tres, haciendo énfasis en Kim al cual le recordó que irían a ver un partido de Hockey ese fin de semana.

Levi tarda bastante en despedirse de Alex y es entendible, la joven pelirroja que ya tiene la mochila del pequeño sobre su hombro espera pacientemente a que ambos padres terminen.

"Pórtate bien y no pelees" Le reprende el asiático ya que justo la semana pasada recibieron un reporte de que Alex estaba intentando quitarle los juguetes a los demás niños lo cual era un comportamiento que estaban vigilando.

La maestra ya sostiene a Alex en sus brazos, esperando a que ambos padres se despidan como es costumbre.

"Bye, mi pequeño" sonríe Levi depositando un beso en su mejilla al igual que Nico pero del otro lado, provocando risas del menor.

"Bye, campeón" Musito Nico de la misma forma.

Kim y Schmitt comenzaron a caminar por el largo pasillo, en dirección de sus respectivos servicios habian intercambiado un par de palabras antes de comenzar a cada uno tomar su rumbo, iban concentrados en sus propios asuntos hasta que...

"¡Bye!~" Una angelical voz detuvo los pasos de ambos médicos.

El jovén matrimonio se volteo para mirarse mutuamente a los ojos por unos segundos casi como analizando la situación. Para después girar sobre sus propios ejes y enfocar como su pequeño aún esta mirando en su dirección con una enorme sonrisa.

"¿Alex...?" susurró Levi sorprendido, aun confundido por lo que estaba pasando. Mientras que Nico aún seguía en shock.

"¡Bye, Bye!" repitió de nueva cuenta el pequeño y regordete bebé en los brazos de su cuidadora. La cual lucía conmovida por la escena, ya que conoce a Alex desde que este era un pequeño bebé de menos de tres meses de nacido.

Ambos padres caminaron a pasos apresurados, casi corriendo por el pasillo recibiendo un regaño por parte de Bailey, algo que no tomaron en cuenta porque estaban hipnotizados por la belleza de su pequeño el cual acaba de musitar sus primeras palabras.

No estaban decepcionados de que esta no fuera mamá o papá, ¡en absoluto! Estaban celebrando el logro de su pequeño.

"Dilo otra vez mi amor, dilo, dilo por favor" Rogó Levi sacando su teléfono tan rápido como le fue posible, tardando una eternidad en abrir la cámara debido a los temblores que tenía su mano debido a la emoción.

Una vez que lo logro, Nico es quien se dirige a su pequeño ya que este se había quedado callado "¿Puedes decirlo de nuevo Alex? Di, <Bye>"

El pequeño de ojos verdes se mantuvo serio un segundo, para después soltar un par de carcajadas "¡Bye!" La palabra apenas es entendible, de hecho el pequeño rizado hace más énfasis en la letra e que en las primeras letras.

Pero para sus padres es más que suficiente...