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"El pequeño bebé"

Sam había dejado al bebé en su cama mientras ella daba vueltas por su habitación, Sam no podía dejar al bebé afuera estaba haciendo mucho frío y se pondría a ver congelado.

Sam no sabía que hacer, ella no era una experta en cuidar a bebé pero no podía dejar a bebé solo y más cuidando lo habían dejado en su puerta.

Sam se detuvo al escuchar un pequeño sollozo, Sam volvió a ver al bebé, el pequeño se estaba moviendo quitando sus pequeñas sábanas, Sam se acercó a el y le ayudo a quitarlas, olvidó por completo que adentro hacia calor.

Sam vio fijamente al bebé el cual la miraba, Sam le sonrió causando una pequeña risa al pequeño bebé el cual agarró un pequeño pedazo del cabello de Sam.

—No, no, no eso no se come, pequeño — dijo Sam quitando con cuidado sus cabellos de la pequeña mano del bebé.

Harry empezó a hacer muecas indicándole a Sam que quería llorar.

—Oh, no,no, no llores — dijo Sam tomando entre sus brazos al pequeño bebé.

Samantha camino con el pequeño bebé por toda la habitación, Harry ya había parado de llorar pero un así hacia pequeños sollozos. 

—Claro, tienes hambre— dijo Sam mirando al pequeño bebé que sonrió.

Sam agarró sus cosas y dinero y fue a una pequeña tienda que le quedaba cerca de ahí, Samantha agarró un pequeña cesta y agarró unas cosas para el pequeño Harry, Samantha pago las cosas que agarró.

—Vez, Harry de eso sirve poder ganarle una apuesta a tu hermano— dijo Samantha orgullosa de poder comprar algo con el dinero que le había quitado a su hermano, Max.

Sam dejó a Harry en un pequeño portabebé el cual había comprado mientras le daba un peluche que ella tenía para que se entretenga.

Samantha fue hasta la cocina y empezó a lavar el biberón para luego empezar a hacer la fórmula para Harry.

Samantha ya había acabado, el biberón ya estaba tibio, Sam se dirigió hasta donde Harry y lo agarró entre sus brazos, Sam dirigió el biberón a la pequeña boca de Harry, Harry empezó a comer mientras Sam con cuidado se sentaba en el sillón para descansar.

—Esta rico pequeño— dijo Sam viendo como Harry

Harry solo la miraba mientras abría y cerraba su pequeña manita.

Samantha solo lo miraba como poco a poco se iba quedando dormido, Sam al ver cómo Harry dormía tranquilamente subió hasta su habitación y dejó a Harry en su cama mientras ella se acostaba a un lado de él.

A Sam siempre le habían gustado los bebés y le había pedido un sobrino a su hermano pero este siempre se negó, Sam empezó a cerrar los ojos mientras acariciaba la cabecita de Harry el cual ya se encontraba dormido.

Sam cayó dormida al lado de Harry mientras esté se movió un poco más para sentir los cálidos brazos de Sam.

Al día siguiente Sam fue despertanda por el timbre de su nueva casa, Sam se paró y voltio al lado de ella donde se encontraba Harry todavía dormido.

Sam sonrió y le dió un pequeño beso y se levantó lentamente de su cama, Sam bajaba las escaleras mientras escuchaba el timbre sonar de nuevo.

—Ya voy— dijo Sam alto para que la escucharan.

Samantha abrió la puerta encontrando a Maggie con una sonrisa. Samantha se quedó quieta mientras veía como su amiga entraba con su fuera su casa.

—Maggie— dijo Sam mientras Maggie sacaba las copas y el vino.

—¿Qué?— dijo Maggie mirando a Samantha. —Vine a tomar algo de vino con mi ami— Maggie fue interrumpida por un llanto. —Eso no es un llanto de bebé, tus vecinos tienen un bebé un poco ruidoso— dijo Maggie sentándose en la mesa.

—No, es de los vecinos— dijo Sam mientras subía corriendo a su habitación, mientras Maggie la veía confundida.

—¿Cómo que no?— preguntó Maggie confundida.

Samantha bajo lentamente mientras Maggie la veia detenidamente. Samantha le sonrió mientras se giraba un poco para que Maggie viera al pequeño bebé.

—Sam, ese es un bebé— dijo Maggie mirando a su amiga mientras ella asentía. —¿Eres niñera?—preguntó Maggie.

—No— dijo Sam a largando la o.

—Entonces que haces con un bebé— dijo Maggie.

—Lo dejaron ayer en mi puerta— dijo Samantha. —Y decidí cuidarlo— dijo Sam.

—Qué— dijo Maggie mirando a su amiga. — Por Dios, cómo vas a cuidar a un bebé si apenas puedes cuidar de ti misma— dijo Maggie mirando a su amiga.

Por Dios no es tan complicado cuidar a un bebé, creo — dijo Sam mirando a su amiga la cuál negaba.

—Bueno eso lo decides tu— dijo Maggie. —Pero bueno está bonito el niño— dijo Maggie mientras tomaba su vino. —venga deja cargarlo— dijo Maggie olvidando por completo lo que dijo antes.

Sam y Maggie estuvieron hablando sobre como le diría a su familia, mientras Maggie jugaba con Harry.

—Bueno, es hora de que me valla— dijo Maggie pasándole a Harry a los brazos de Sam.

—Si, nos vemos luego— dijo Samantha cerrado la puerta.

—Bueno, y tú yo ahora que hacemos, yo creo que dormir un poco más no?— dijo Sam mirando a Harry el cual solo sonreía mientras agarraba la cara de Sam.

Sam mordía con sus labios la manita de Harry haciendo que esté se riera.

—Bueno, creo que es hora de bañarnos— dijo Sam mirando a Harry mientras caminaba a el cuarto agarrar las cosas de baño que le compro a Harry.

Sam empezó a quitarle toda su ropita, Sam de agachó quedando a la altura de Harry percantándose de una cicatriz en su frente en forma de rayo.

—¿Cómo te hicieron ésto?— preguntó Sam tocando la pequeña cicatriz.

Sam solo negó con la cabeza, mientras cargaba a Harry, Sam se dirigió al baño y empezó a bañar a Harry.

Sam empezó a cantar un hermosa melodía la cuál llamó la atención del pequeño que estaba jugando con el agua.

—¿Qué pasa pequeño?— preguntó Sam confundida mirando a Harry el cual el igual la miraba.

Después del baño Sam le dió su pequeño biberón haciendo dormir a Harry.

Sam se acostó al lado de Harry mientras se ponía a pensar que había pasado con los padres de Harry, Sam tenía un presentimiento que decía que ellos no hubieran dejado a su pequeño hermoso hijo afuera de una casa, Sam solo sonrió, esperaría que algún día sus padres de Harry fueran por el y pudiera ser feliz, pero si no es así y ellos no volvieran por razones que ella no conoce entonces ella lo cuidará por ellos.

The motherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora