H O M E (Jeffbarcode) (Corrigiendo)

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Barcode POV

—¿Te gustó el regalo que te di?— me pregunta Jeff una vez bajamos al sótano mientras me abraza por detrás.

—Está muy lindo, pero no debiste hacerlo.

—¿Por qué? Necesitas el auto para ir a la Universidad, incluso para verme— sentir sus manos sobre mi estómago me están volviendo loco.

—Es verdad, pero no tengo lincencia todavía y es un regalo muy caro.

—Cállate, te mereces eso mucho y mas— me doy la vuelta y pongo mis brazos al rededor de sus hombros.

—No es cierto— sus manos sostienen mi rostro y acto seguido siento sus labios en mi mejilla, es un toque tan tierno que quiero llorar.

—Si aprendes a conducir te daré una sorpresa.

—No quiero mas sorpresas Jeff.

—Vámonos que se nos hace tarde— nos subimos a su auto y no me puedo sentir mas feliz —¿Leiste la carta que te escribí?

—No, de hecho estuve a punto de romperla.

—Ni si te ocurra— su rostro muestra una expresión tan seria haciendo que me sienta mal, incluso quería botar a la basura los demás regalos.

—¿Dónde me llevas novio mio?— me da una sonrisa tan amplia y brillante que me es imposible no inclinarme a su lado para dejar un beso en su mejilla.

—Por ahora iremos a mi apartamento, no me doy una ducha desde ayer.

Nos reímos y mientras Jeff conduce hacia nuestro destino disfrutamos el trayecto cantando nuestras canciones favoritas, sonreírnos, por mi parte no puedo quitarle los ojos de encima, su expresión tan seria cuando conduce pero que se esfuma si le digo palabras lindas, sin evitarlo mi corazón se retuerce porque no pensé vivir estos momentos de nuevo, me recuerda a lo que vivimos antes pero en esta ocasión algo se siente distinto.

—Llegamos mi amor— nadie me va a quitar esta felicidad de encima y mas si me dice así.

—Un gusto verlo de nuevo joven Barcode— me dice el guarda una vez estamos dentro del edificio.

—Buenas noches— le doy una calida sonrisa y camino detrás de mi ahora novio hacia el ascensor, Jeff otra vez es mi novio, acaso es un sueño.

—Eres tan lindo Barcode.

—Tú también— procedo a acercarme para darle un beso, nunca me canso de sus labios, además que los había extrañado demasiado.

—¡Hola mis bebés!— les dice emocionado a nuestros gatos una vez entramos a su apartamento, con una sonrisa solo veo como levanta a cada uno y les un beso.

—¿Extrañaron a papi?— esta vez les digo yo y los acaricio mientras ellos se restriegan contra mis piernas.

—¿Quieres algo de tomar?

—Si, una coca por favor.

Jeff me acerca la lata y se queda mirándome en silencio mientras el bebe de la botella de agua.

—¿No vas a desayunar?— desde que lo vi la primeza vez lo he notado mas delgado y con ojeras.

—No, ya pronto iremos a almorzar— otra vez se queda en silencio mirándome, espero no esté pensando cosas malas sobre mí—me gusta tenerte aquí.

—Desde cuándo tan tierno Jeff Satur, ve a bañarte rápido.

Se acerca para darme un rápido beso y  va hacia la habitación, yo aprovecharé para ver algo en la tv.