H O M E (Jeffbarcode) (Corrigiendo)

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Jeff POV

—Así que eras el que tanto molestaba llamando a Mile— dice Barcode antes de llevarse un pedazo de fruta a la boca.

—Si, incluso le tuve que dar explicaciones a Apo para que no nos matara cuando me viera llegar.

—No es justo que todos supieran menos yo.

—pues esa era la idea.

—¡Ya trajeron los trajes!— entra gritando Apo con varios paquetes encima.

—Sé que no tienen tan buen gusto como así que yo elegí cada uno.

—Alístensen rápido par de tortolitos— nos dice Apo y se va de la mano junto con mi hermano.

—Que chévere es verlos así de enamorados y felices— dice Barcode una vez quedamos solos de nuevo.

—Nosotros también hemos estado así.

—Es cierto pero hemos pasado por mucho dolor.

—Me iré a bañar, te dejo descansar de mi existencia— tomo el traje y los platos sucios que dejo en el lavaplatos.

Le doy una última mirada a Barcode antes de entrar a la habitación, miro la cama desorganizada y una sonrisa un poco melancólica se emboza en mis labios, pues el menor siempre que tuvo la oportunidad me decía que no me había perdonado. Sin embargo, dormimos juntos después de haber tenido sexo de nuevo, nos levantamos abrazados uno al otro y fue algo bonito porque desde que se fue de muestro apartamento me había levantado con la triste soledad.

Dejo el traje sobre la cama y me voy hacia el baño, me quito la ropa y me meto debajo del agua tibia.

Antes de dormir conversé muchas cosas con Barcode, me preguntó si tenía algo con alguien mas, lo cual me pareció absurdo después de lo que dije, enserio no estaba jugando cuando le di ese anillo de promesa, también aclaramos otras dudas y eso alivianó un poco las cosas entre los dos pero comprendo que siga con dudas incluso si le mostré pruebas.

La puerta se abre de golpe y la división de vidrio está completamente empañada sin dejarme ver quien es, no sería raro que sea Mile a molestarme con que me bañe rápido o darme información de un pedido que he hecho.

—Mierda me asustaste— le hago saber después que sin previo aviso abriera la puerta de vidrio y asomara su cara.

—¿Puedo ahorrar tiempo contigo?

—Di que solo te quieres bañar conmigo.

—Ugh está bien, si quiero pero también tengo a tu hermano acosándome porque todo necesita salir bien.

—Que dramáticos son, ni que fueran miles de invitados, solo somos los cuatro.

—No los juzguemos tanto, están enamorados y es su día especial.

Me concentro en el shampoo en mi cabeza en vez del bonito cuerpo de Barcode, es una pura tentación aquí dentro conmigo así sin ropa, aunque con ropa también lo es.

—¿Vas a seguir mirando la pared o me vas a a besar?

—Es que quién te entiende Barcode, pareces enojado conmigo y despectivo y luego quieres que te mime.

—Deja de hablar tanto.

—Entonces ya no te beso, que grosero eres conmigo.

—No no no mentiras, veeeen bésameee.

Me acerco solo para besarlo y abrazarlo  durante unos cuantos minutos.

—¿Si sabes qué seguimos siendo novios?– cambiamos de lugares para retirarme el shapoo y jabón del cuerpo pero sus palabras me dejan en shock por un instante.