"Cuando dejes de ser inútil, diré que eres mi hermana menor."
Las palabras de su hermano mayor marcaron algo en ella, ahora teniendo un meta para poder ser reconocida por sus dos hermanos mayores se adentra en el mundo de fútbol para ser la mejo...
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"Pelea contra ti misma y despierta."
Su cuerpo está en la tierra pero su mente vuela más alla del cielo.
Con ella dormida, las demás pueden hacer lo que quieren con el cuerpo aprovechando la reprimiendo de sus sentimientos, tenerlos guardados durante tanto tiempo fue tan dañino para ella qué provocó esto.
Su cerebro no soportaba tanta carga y se dividió en varias partes, formando a sus "fragmentos."
Bienvenidos al circo, la mente de Itoshi Akari es un enigma fragmentado, mientras tres permanecen dormidas.
Otras hacen lo que quieran en el escenario, mostrando de lo que son capaces cómo monstruos de atracción.
Pero las demás no son más que unas simples creaciones de la original, quién niega que sean parte de ella, dándole más fuerzas, con el tiempo las creo, con el tiempo las va a desaparecer.
Un estallido de cualquier emoción es un llamado para que todas despierten a excepción de una y el fútbol es quién provoca esos estallidos.
No, mejor dicho, Blue Lock es quién lo provoca.
¿Pero que podía hacer Akari para poder aceptar que aquellas rarezas eran parte de ella?, no tiene la menor idea.
No puede tomar el mando de su propio cuerpo, se retuerce y grita, en busca de libertad mientras su propia mente crea una jaula para ella, sin querer dejarla salir.
¿Dormir o Despertar?
Mientras la mente va en su contra, su corazón se vuelve su principal arma.
Aunque el corazón es el peor de los guías, siempre será tu mejor compañero. Puede ser el causante de tus ataduras pero también el de tu libertad.
Mientras el corazón tenga el alma, la pasión jamás faltará, la valentía soldará el corazón y el miedo desaparecerá.
Ten un estilo siniestro y misterioso, soldar tu corazón con determinación y convicción será la clave para avanzar, Akari dejará de ser esclava de su propia mente.
Su cerebro debe adaptarse a lo qué hay y volverse igual de fuerte que su corazón para poder avanzar al compás, sin importar el rival, la adversidad y su dificultad, debe ser una con cada centímetro de su ser.
Ella debe dejar de ser lo qué pintan los demás en su cuadro, debe convertirse en su propia artista.
Amar su obra de arte y conocerla de pies a cabezas, rompiendo cualquier pensamiento negativo.
