Capítulo 37 La facción de un solo integrante

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A los ojos de la princesa la fiesta era "sencilla" tanto en la decoración como en el número y calidad de los invitados no dejaban duda a que esta era la fiesta de un noble de reciente asenso, un noble pobre si se veía desde el punto de vista de los poderosos nobles, sin embargo algo era diferente a los ojos de Raciel

Las sonrisas eran genuinas, como princesa sabía reconocer expresiones faciales falsas, después de todo para un noble y personas similares ser capaz de cambiar de expresión debía ser tan importante como respirar y aun así pudo decir sin temor a equivocarse que las sonrisas en los presentes eran genuinas

Todos los invitados celebraban el triunfo de su lord casi como si fuera el suyo, si bien no era raro encontrar esa clase de subordinados, una concentración tan alta fue una sorpresa para Raciel

Con cada paso que daban, todos le daban la bienvenida a la princesa como la invitada de honor mediante una suave reverencia, por lo común siempre recibía bienvenidas formales y frías de modo que este ambiente fue bastante agradable para ella

Rápidamente Raciel justificó esta actitud de los invitados al hecho de que Liam era un noble de la frontera, un lugar al que sin duda la información difícilmente llegaría de manera abundante, por lo que puede que las figuras más importantes supieran de ella, no obstante ser invitado a este lugar y no haberse informado de antemano sobre la identidad del invitado de honor sería el colmo

-He escuchado de sus logros en el tema de la terraformación de su sistema (Raciel)

Sin duda un tema de conversación inofensivo para comenzar sería el de los logros que llevaron a celebrar esta fiesta, incluso entre aquellos que evitaban a Raciel su ego no les permitía negarse a hablar de sus logros teniendo un tema de conversación que alejara el silencio, no obstante la respuesta de Liam fue todo lo contrario

-En realidad yo no hice nada,...un día le dije a mis subordinados que deseaba fundar una pequeña ciudad y antes de darnos cuentas ya estábamos aquí (Liam)

-Ya veo...en ese casos su subordinados deben ser increíbles (Raciel)

-Y los son, no creo que exista nadie igual a ellas en toda la galaxia (Liam)

-Desearía tener subordinados así de confiables (Raciel)

Mientras Liam alababa a sus subordinados pero en especial a sus doncellas Raciel soltó un murmullo casi inaudible más para sí misma

Actualmente solo tenía el título de princesa a su nombre y una serie de sistemas bajo su mando, lamentablemente al no tener subordinados bajo su mando directo, debía depender de la mano de obra proporcionada por las familias de guardianes que designó a su dominio antes de despertar en esta nueva era

La lealtad de esos guardianes se había erosionado con el pasar de las generaciones hasta el punto de que ellos ya consideraban ese dominio como suyo, de modo que al enterarse de que Raciel estaba viva sería amable decir que ellos estarían enojados

Ellos eran dueños de esas tierras en todo menos en el nombre, durante ese tiempo abusaron de su posición explotando todo lo que pudieron dejando el dominio en un hilo entre la vida y la muerte usando la excusa de ser los guardianes de esas tierras como escudo para que nadie interviniera

Nadie podía decirles nada con excepción del emperador y la misma princesa, pero dado que no era un tema de importancia para el actual emperador solo Raciel podía hablar

Si ella hablaba el imperio tendría que apoyarla incluso si hubiera a quienes no le agradara, ¿pero qué pasaría después?, el dominio casi en ruinas terminaría aún más en ruinas y por miedo a eso Raciel no hablo limitándose incapaz de hacer algo y menos a contar con el apoyo de alguien

Mi nueva vida como lord espacialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora