Capítulo 15

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Dos días después bajo el cuidado de JongIn y KyungSoo comenzaba a sentirse mejor. De verdad.

Comer se había vuelto cada vez más sencillo y los pensamientos intrusivos e innecesarios se habían reducido cada vez más -aún existía un par que decidió persistir de vez en cuando, pero eran bastante soportables. KyungSoo tenía el poder de dominarlos-.

Él también comenzaba a sentirse como un ser humano nuevamente. Bañarse y hacer algo por sí mismo dejó de ser una tarea difícil y dolorosa y sus sentimientos se habían estabilizado.

Y KyungSoo sabía, él realmente lo hace, que esto se debe en gran parte al propio JongIn.

El tipo no lo había dejado solo en ningún momento, tampoco le permitió permanecer encerrado en la habitación. Lo llevó a caminar ambos días, lo entretuvo con algunas películas malas y cocinó a su lado a pesar de no ser tan bueno en ello. Lo ayudó a despejarse y le impidió quedarse solo con sus pensamientos porque sabía que si lo hacía él se desmoronaría.

Con la mente ocupada y la visión de los paisajes naturales cercanos, KyungSoo encontró mejoría. Y ahora él se sentía listo para dar inicio a su rutina.

JongIn no se había molestado en ir a la oficina para cuidarlo, lo que significó dos días libres para él y para NaYeon, y KyungSoo se sentía ligeramente ansioso por ello. Le había preguntado a JongIn al respecto, pero el mayor, con cierto desdén, le dijo que estaba bien porque su padre se estaba haciendo cargo de la empresa por ahora.

Y KyungSoo se sintió mortificado porque aparentemente su suegro -y su suegra, obviamente- sabían que las cosas no estaban del todo bien con él, y aunque sabía que el tema no sería tocado por ellos, KyungSoo se sintió un poco incómodo y avergonzado al final.

JongIn, notando su descontento, le había dado un pequeño golpe en el centro de su frente y un momento después le dijo con tranquilidad:

ㅡNo saben nada, simplemente les dije que estabas enfermo y que decidí cuidar de ti. Ellos me dieron la semana libre.

Esto no lo relajó por completo, pero al menos le arrebató ese significativo peso de encima.

Volviendo al tema principal: KyungSoo estaba esperando entrar en Kai para dar rienda suelta a sus habilidades laborales, porque no había mejor método de distracción emocional que cumplir con sus obligaciones como el AP de Kim JongIn, pero JongIn era un maldito obstinado y se había negado a ir a la oficina.

Al menos no todavía.

En consecuencia, ellos habían estado saliendo, comiendo platillos de distintas partes del mundo en los vistosos restaurantes de Gangnam, asistieron a un par de museos y exhibiciones artísticas y ayer visitaron un jardín botánico realmente hermoso. JongIn se estaba esforzando tanto por distraerlo y KyungSoo solo podía mirarlo de reojo y sentirse entre cálido e impotente porque era algo lindo, pero en este punto resultaba ser innecesario.

De todas formas, él conocía a JongIn y sabía que no lo dejaría volver al trabajo hasta que la semana terminara, por lo tanto, solo podía rendirse y aceptar su destino.

Le escribió a BaekHyun y le informó que pasaría unos días con JongIn y luego miró el mesón de granito donde descansaba su desayuno recién hecho.

Desde hace un par de días sentía algo en su pecho, una corazonada que crecía y no le dejaba terminar definitivamente con los sentimientos corrosivos en su interior. Era una petición, era un llamado, y KyungSoo se mordió el labio al pensar en ello.

JongIn estaba preparando el té para ambos y KyungSoo se distrajo brevemente de sus pensamientos con la imagen de las elegantes líneas de los músculos de su espalda desnuda. El mayor se reunió con él no mucho después, le dio un beso en la frente y se sentó a su lado para comenzar a comer.

I: Tan solo un poco obstinadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora