Bright asintió a los centinelas mientras se abría camino hasta la escalinata del palacio, odiaba vivir aquí. Él prefería la parte del clan menos poblada. En este lugar, había gente que salía y entraba en todo momento, de día o de noche.A pesar de todo eso, estaba contento de estar de regreso, habían sido un par de semanas largos. Odiaba estar fuera tanto tiempo.
Echaba de menos su casa.
Echaba de menos a sus amigos.
Y extrañaba a Win.
Bright no podía creer lo mucho que extrañaba a Win.
El hombre era casi lo único en lo que pensaba una y otra vez. Bright sabía que tenía que lidiar con sus sentimientos hacia el otro hombre y meter su cabeza en el juego. Él estaba tomando demasiados riesgos, y uno de estos días, le costaría a alguien su vida.
Antes de que pudiera hacer frente a sus sentimientos hacia Win, Bright sabía que tenía que averiguar exactamente lo que eran esos sentimientos. El hombre lo confundía. Él no era un guerrero, sin embargo, lo era. No era un Afrit, sin embargo, lo era. Lo único real que Bright sabía era que Win era su Demonas Amaté.
Los pasos de Bright se desaceleraron cuando llegó a la entrada principal del palacio y encontró a Gun que iba y venía por el duro mármol. Los brazos de Gun estaban cruzados sobre el pecho, y su cara se veía apretada, preocupada.
Algo pasaba, evidentemente, algo molestaba al hombre.
—Gun, ¿está todo bien?
Gun se dio la vuelta. Suspiró al empujar su mano por el cabello castaño —Joder, Bright, casi me matas del susto. —Gun frunció el ceño mientras miraba a Bright— ¿Qué estás haciendo de regreso? Pensé que ibas a estar fuera durante un par de meses.
Bright se encogió de hombros. —Ya no soy necesario en este momento.
A decir verdad, lo más probable era que sí lo fuera. Sólo sabía que necesitaba conseguir enderezar su cabeza antes de que alguien resultase herido o algo peor. No estaba trabajando con la cabeza ahora mismo, y eso significaba que estaba poniendo en peligro a otras personas. Hasta que pudiera resolver las cosas, lo mejor sería que él se quedase en casa.
—Oh. —Gun profundizó el fruncimiento del ceño, y empezó a caminar de nuevo.
—¿Dónde está tu compañero?
—Off fue a la superficie con los demás.
Bright asintió. —¿Otra misión?
—No, no, Win se puso en contacto conmigo. Él está en problemas. Parece que se encontró con un grupo de Shayatin y necesitaba ayuda.
—¿Qué? —gritó Bright cuando el miedo abyecto llenó cada célula de su cuerpo.
—Off le dio a Win una piedra de ijada cuando se marchó. Win la utilizó para…
—¿Qué quieres decir con “cuando se marchó”? —cortó Bright—. Win es un elegido. Su lugar está aquí.
Las manos de Gun se posaron en su cadera mientras miraba a Bright. —Bueno, al parecer, no tenía ninguna razón para quedarse, así que se fue a casa.
Bright gruñó. —¿Cuándo? —preguntó mientras apretaba los puños.
—¿Cuándo qué?
—¿Cuándo se fue a la superficie? —Bright se negó a llamar a ese lugar su hogar. La casa de Win estaba aquí, en Jinnistan.
—El mismo día que te fuiste.
La sonrisa en la cara de Gun, junto con sus palabras, tomó toda la ira de Bright. Él sabía exactamente por qué el hombre se había ido. Si algo le sucedía a Win, sería culpa suya. Había llevado a su Demonas Amaté lejos.
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𝕯𝖊𝖒𝖔𝖓 𝖔𝖋 𝖆𝖎𝖗// 𝑩𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕𝑾𝒊𝒏
Teen FictionWin sabe quién es su compañero demonio, pero Bright no le da ni la hora del día. Bright se va sin decir adiós a Win. Con el corazón roto, Win regresa al mundo de la superficie. Por desgracia, los demonios de las sombras parecen saber quién es, y em...