Win quería esos momentos también.
La única cosa que lo detenía era el hecho de que Bright lo viera como su Demonas Amaté, su compañero.
Él era más que eso.
Era Win, un ser humano que tenía sentimientos. Win quería que Bright lo quisiera por lo que era, no por lo que él representaba.
Win había estado esperando toda su vida para averiguar por qué era tan indiferente cuando se trataba de sexo y relaciones, y ahora sabía por qué. No había encontrado a su compañero todavía. Pero eso no significaba que Bright pudiera usarlo y tirarlo a un lado o usar palabras bonitas para reclamar a su Demonas Amaté.
Él era Win, ¡maldita sea!
—Hasta que no me puedas ver por lo que soy, no creo que debamos vernos. —Esas fueron las palabras más duras que Win había dicho, pero necesitaba que Bright se diese cuenta de que él era más que un compañero.
—Entonces muéstrame quién eres. Háblame de ti. —Bright quedó inmóvil en la puerta—. Dime quién es Win Metawin.
De acuerdo.
Win no lo esperaba.
Él estaba esperando que Bright demandara el reclamarlo o que saliera fuera de la habitación y lo ignorara. ¿Pero esto? —Yo... eh... soy como el chocolate.
Bright sonrió mientras tomaba la mano de Win y lo guiaba de vuelta a la cama.
—Qué estás haciendo…
—Nosotros sólo vamos a conocernos. Nada más —le aseguró Bright cuando él se sentó en el borde de la cama y dio unas palmaditas en el espacio junto a él—. Ven, Demonas Amaté, siéntate. Habla conmigo, háblame de mi compañero.
Win se sentó, manteniendo un montón de espacio entre ellos. Miró a Bright, sin saber qué decir. No es que Win no quisiera llegar a que se conocieran el uno al otro.
Simplemente había sido atrapado con la guardia baja.
—¿Qué es ese chocolate del que hablas que te gusta tanto?
Win sintió que sus cejas se elevaban. —¿En serio? ¿Nunca has probado el chocolate?
—No sé. No he oído hablar de él antes.
—Uh, es un dulce, de sabor dulce. —Win sacudió la cabeza—. Maldita sea, las cosas son realmente arcaicas aquí abajo.
—Tú deseas algo de ese chocolate, ¿no?
Win se encogió de hombros ligeramente. —Bueno, sí, yo nunca bajé algo de chocolate.
—Si me dices cómo llegar a ese chocolate, voy a traértelo de mi próximo viaje a la superficie.
—¿Tienes dinero?
—¿Dinero?
—Moneda del mundo de la superficie. —Win podía decir, por la cara de confusión de Bright, que no lo tenía. Se levantó y sacó un billete de un dólar de su bolsillo y se lo entregó— Toma, esto debe comprar al menos una barra de chocolate. Al volver a la superficie, encuentra un mercado y compra una barra de chocolate.
Bright frunció el ceño al dólar en la mano. —¿Qué tipo de barra de chocolate?
Win se rió entre dientes. —Algo con chocolate oscuro en ella.
—¿Chocolate negro? —Bright miró hacia arriba.
—Sabe mejor que el chocolate con leche.
—Ah. —Bright asintió como si entendiera, pero la confusión en su rostro decía lo contrario.
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𝕯𝖊𝖒𝖔𝖓 𝖔𝖋 𝖆𝖎𝖗// 𝑩𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕𝑾𝒊𝒏
Teen FictionWin sabe quién es su compañero demonio, pero Bright no le da ni la hora del día. Bright se va sin decir adiós a Win. Con el corazón roto, Win regresa al mundo de la superficie. Por desgracia, los demonios de las sombras parecen saber quién es, y em...