Parte 7

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No me queda otra opción que saltar del barco, si me quedo me hundiré con él. Sin pensármelo dos veces me descalzo y me tiro al agua. Está muy fría, y el oleaje me sube y me baja sin descanso. El barco finalmente se hunde en muy poco tiempo. En la superficie quedan trozos de madera y alguna de las cajas de la bodega. También están algunos de los cuerpos que tras llenarse de agua se sumergen. Nado lo más rápido posible hacia una de las cajas y me agarro lo más fuerte que puedo. No voy a salir con vida de esto, es imposible.

De pronto, un ser con alas me eleva y me lleva volando. Tal vez sea esto lo que pasa cuando te mueres. Por su aspecto es posible que me lleve al infierno. Por el color negro de su cuerpo y sus alas, podría ser el ángel negro, Lucifer. Le pregunto quién es, pero no me contesta. Me lleva hacia la orilla, puedo ver el puerto de Barfleur.

Justo cuando estamos a media milla más o menos, me suelta para que me caiga al agua. Se queda quieto en el aire y mirándome fijamente. Una mirada fría y siniestra que se clava, sus ojos son rojos como la sangre. Sin decir nada, se va hacia las estrellas como una gran estrella fugaz. La más grande y brillante que he visto jamás. En tan solo un pestañeo desaparece. No entiendo nada, lo de esta noche ha sido de locos. Es imposible que esté muerto, mi corazón late tan veloz que parece que va a salir del pecho en cualquier momento. Tengo que nadar hacia la orilla o moriré congelado.

El diario de Jensen - «La historia de Jesse»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora