Baby heaven's in your eyes - SHIMKONGZ.

013

La semana siguiente pasó en un abrir y cerrar de ojos; Ricky tuvo dos exámenes y sus padres lo llevaron a una gala, así que no hace falta decir que la segunda semana de clases había sido totalmente caótica.

Era miércoles y había quedado en ir a casa de Eusang esa tarde para empezar su proyecto de economía. Tenían que elegir una empresa de éxito y básicamente hacer una presentación. Era fácil, a Ricky le gustaba mucho ir a casa de Eusang porque sus padres casi nunca estaban en casa y no había nadie molestando, ni siquiera su hermano pequeño.

Le acompañó a la escuela de Gunwook para que pudiera hablar con él y darle un beso de despedida. Fue lindo y también desagradable al mismo tiempo. Se ofreció a esperarla junto a la estación de autobuses para no tener que molestarles mientras se chupaban la cara mutuamente.

Estaba observando a Gyuvin, que estaba apoyado en la pared fumando con Hanbin, cuando alguien tiró de su chaqueta. Era un niño pequeño con la ropa sucia.

"Hola, ¿puedes darme algo de dinero?"

"No. Vete." Ricky murmuró y se apartó de él. Odiaba a los mendigos.

Observó al niño mientras caminaba por el patio de la escuela, hacia Gyuvin y Hanbin.

Oh, esto iba a ser bueno.

Se quedó con la boca abierta cuando vio que el niño le tendía la mano a Gyuvin y éste buscaba en sus bolsillos antes de ponerle un billete en la mano.

El niño le sonrió y le dio las gracias, antes de salir corriendo con una gran sonrisa en la cara.

Ricky se quedó mirando al suelo hasta que Eusang vino a buscarlo, avergonzado por haber sido grosero con el niño.

Cuando llegaron a la casa de Eusang cogió una botella de agua y dos vasos, antes de que ambos subieran.

Llevaban treinta minutos cuando sonó el timbre, sobresaltando un poco a Ricky.

"¿Esperas a alguien?"

"Gunwook dijo que se pasaría por aquí, así que probablemente sea él. Tenía algunas cosas que atender así que por eso no vino con nosotros."

Ricky asintió y esperó a que Eusang bajara y dejara entrar al chico. En realidad le gustaba Gunwook porque era ruidoso, alegre y muy divertido.

"¿Me has estado engañando con Ricky entonces?" Preguntó Gunwook en cuanto entró en la habitación y vio al rubio en el escritorio.

"Sí." Dijo Eusang, y Ricky se habría defendido si no hubiera visto la sonrisa de Gunwook, que significaba que estaban bromeando.

"¿Puedo pedir pizza?" Preguntó el pelinegro cinco minutos después de tirarse sobre la cama y Eusang asintió.

"¿De qué tipo quieres?"

Ricky giró la cabeza para mirar a Gunwook, que ahora estaba tumbado boca abajo con el teléfono en la oreja.

"Pepperoni, por favor."

Gunwook asintió y repitió el pedido en el teléfono.

"¿Viene a menudo?" Le preguntó a Eusang mientras escribía en su portátil.

"Sí." Ella sonrió y Rivky pudo ver que estaba completamente enamorada de Gunwook. Se preguntó si alguna vez encontraría eso con alguien, si alguna vez sonreiría al escuchar el nombre de alguien así.

"¿Y qué va a hacer Gyuvin por su cumpleaños?" Eusang abrió el tema treinta minutos después, cuando habían terminado el proyecto y estaban todos sentados con las piernas cruzadas en la cama con tres pizzas entre ellos.